El rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Héctor Floriani, se mostró sumamente preocupado por la decisión del gremio que nuclea a los docentes universitarios (Coad) de no comenzar el dictado de clases en el segundo cuatrimestre. "El gobierno nacional debería asumir que la pauta salarial quedó absolutamente desactualizada, pero la suspensión de las actividades académicas es una medida extrema. Hay que ponderar el daño que se puede causar a los estudiantes", destacó el rector e instó a las partes "a realizar un esfuerzo para acordar una solución".
Con una participación de 2.158 docentes, Coad realizó un plebiscito para considerar las medidas de fuerza. En ese marco, el 80%, 1.718 docentes, avalaron la iniciativa de no comenzar las clases en el segundo semestre del año. Sin embargo, esa votación se produjo en el universo del 26 por ciento del cuerpo docente. La interrupción del ciclo lectivo comenzaría a regir el próximo 6 de agosto.
"La preocupación es legítima y la medida se hace en consonancia con Conadu por el no cierre de la paritaria. Pero esto nos lleva a las partes a hacer un esfuerzo para solucionar el conflicto", consideró Floriani y subrayó que existe una dificultad concreta y seria en el financiamiento del Estado.
"Si bien insisto en el fundamento del reclamo, no recuerdo antecedentes de un conflicto tan extenso. El daño que puede causar a los estudiantes universitarios y a los de las escuelas medias, genera una ruptura y un efecto que invito a reflexionar si es proporcional al derecho que se percibe", ahondó el rector.
En cuanto al reclamo de un aumento salarial, recordó que la pauta "quedó absolutamente desactualizada y el gobierno debe reformular la propuesta a los profesores", para luego considerar que "la lucha gremial es para recuperar la capacidad del salario frente al avance de la inflación".
Pero en igual línea, el ex decano de Arquitectura se identificó como "docente antes que rector, y como tal tengo una actitud distinta y abogué como profesor por adoptar una actitud diferente a los paros e implementar medidas de otro tipo".
Situación buena
En cuanto al presupuesto que recibió la UNR y frente a los impuestazos, Floriani destacó que "esta Universidad, en función de la buena administración que tenemos, está en una situación razonablemente buena, podemos llegar; sin dejar de lado que podría haber más recursos y sabríamos dónde invertir".
Hemos hecho algún pedido para que el gobierno actualice las partidas, pero "el meollo de la cuestión", dijo el académico, es la política salarial docente, a diferencia de los no docentes, que ya acordaron la recomposición con el gobierno para el resto del año.
"Apelo al gobierno y los hemos hecho con otros rectores, para que se reconozca que la pauta quedó desactualizada, ya desde antes de la crisis cambiaria e inflacionaria. Debe ser revisada, pero la medida de fuerza de suspender el segundo semestre es extrema", consideró.