Una vez más, los titulares de taxis volvieron a la carga en el Concejo Municipal para solicitar una recomposición en la tarifa del servicio. Esta vez no fue el 60 por ciento que algunos dueños de chapas habían reclamado la semana pasada, sino que la estimación se redujo a un 40 por ciento. Por ahora, las solicitudes quedaron en estudio en medio de la incertidumbre provocada por la escalada inflacionaria.
Entre las bancas circula la idea de otorgar un 50% desdoblado (30% en septiembre y 20% en noviembre). En tanto, el estudio técnico que elabora el Ente de la Movilidad estaría listo para fines de esta semana.
El miércoles pasado, los referentes de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar) habían acudido a la comisión de Servicios Públicos del cuerpo deliberativo para volcar su estimación sobre una suba tarifaria: 60 por ciento.
Ayer fue el turno de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti) pero con una pretensión menor. La justificación en base a los aumentos de costos les arrojó otro guarismo “pagable”: 40 por ciento.
La reunión semanal fue presidida por su titular, Verónica Irizar del bloque Socialista. Y tal como ocurrió el miércoles pasado, los ediles y edilas recibieron a otra cámara de titulares de licencias. Hasta allí fue nuevamente Mario Cesca, representante de Atti, para marcar su posición que determina un pedido de aumento tarifario. Es decir, un 20 % menos que lo que ya habían planteado en la misma comisión la semana pasada los referentes de Catiltar.
Tarifa “posible”
Cesca habló de tarifa “posible”, ya que según le remarcó a La Capital el desfasaje es del 77 por ciento. El gasto para hacer funcionar un vehículo en forma anual es de 9,9 millones de pesos.
Si se toma el valor de un viaje (479 pesos promedio), por 42 traslados promedios diarios multiplicados por 280 días arroja esta diferencia, ya que da un valor de unos 5,7 millones de pesos. Teniendo en cuenta los 6 mil choferes (con un promedio de 1,5 por auto) con una flota de 4 mil coches de alquiler. “Esto es una foto al 16 de agosto, ni hablar ahora con la suba de combustibles, la película es otra, pero no somos adivinos. Ahora que determinen los concejales qué van a hacer”, señaló Cesca.
El dirigente del sector advirtió que todos los días cae la cantidad de viajes porque aumenta la recesión. “La recaudación de un taxi bruta, desde las 16 a las 4 se facturaban unos 18 mil pesos. Este viernes bajó a 11 mil pesos. Los choferes que están a porcentaje están pensando si se suben arriba del taxi 12 horas o se bajan”, encendió las alertas.
Por eso, el dirigente del sector fue de nuevo al planteo. “Nosotros sugerimos ese aumento y una cláusula de revisión en diciembre”, remarcó e insistió en que se busca una tarifa “posible”, que no implique una baja en la cantidad de viajes y pasajeros arriba de las unidades.
“El estudio de costos nos indica un atraso tarifario del 77 por ciento”, precisó para adelantar que si se busca cubrir los costos de viaje, el viaje promedio debería ser de 849 pesos. Si se accede al 40 por ciento pretendido, el viaje promedio sería de unos 650 pesos.
“Con el clima electoral que habrá el año que viene, si no se saca el aumento ahora será casi imposible. Por eso pedimos cláusula de revisión, porque el 35 por ciento que nos dieron en abril ya se lo comió la inflación. Con los que nos den llegamos a fin de año, pero el tema es el 2023”, justificó Cesca, al marcar que se busca “llegar a diciembre”.
Desdoblado
La problemática, según un sondeo entre las bancas, “continúa en estudio”, mientras la comisión de Servicios Públicos espera los números oficiales del Ejecutivo para determinar su posición, si bien ya circula una versión: un 30% en septiembre y otro 20% en noviembre.
Un vocero del Palacio de los Leones marcó que el estudio técnico estará listo hacia fin de esta semana, o comienzos de la que viene. “Y podría estar entre el 65 al 70 por ciento”, estimó.
El miércoles pasado Catiltar y la Cámara de Mujeres Taxistas pidieron una suba de la tarifa del 60 por ciento. Cabe recordar que Marcelo Díaz, referente de estos titulares, advirtió que la antigüedad del parque automotor ronda los 13 años. También coincidieron con sus pares de Atti al señalar que la última suba tarifaria del 35 por ciento otorgada en abril “no les sirvió a los choferes”.
Con el estudio oficial y los números de los dueños de las chapas, todo se encamina a una definición parlamentaria en el recinto de sesiones para septiembre.