Forro, profiláctico, condón, preservativo. Muchos son los nombres pero el dispositivo es el mismo: una funda de látex que se coloca en el pene erecto en cada relación sexual e impide que el semen entre en la vagina, ano o boca. Es el único método que además de prevenir embarazos previene también infecciones de transmisión sexual. No se compra con receta, su venta es libre.
Su eficacia es alta, siempre y cuando se lo utilice en forma correcta durante toda la relación sexual. Debe colocarse cuando el pene está erecto, se aprieta la punta y se desenrolla hasta la base del pene. Se retira después de la eyaculación, antes de que el pene pierda la erección.
Mitos sobre el preservativo hay muchos. No es cierto que si no se eyaculó se lo pueda volver a usar y no disminuye la sensibilidad. Tampoco es cierto que su uso es responsabilidad sólo del varón.
¿Sabés qué hacer si en una relación sexual el preservativo se rompe, sale, desliza o no se usa o si la persona fue víctima de violación o abuso sexual? Fundación Huésped recordó las medidas de emergencia llamadas profilaxis post exposición (PEP) para evitar infecciones de transmisión sexual.
Se trata del uso de medicamentos para reducir el riesgo de adquirir VIH y otras infecciones de transmisión sexual? En el caso del VIH se deben administrar antirretrovirales dentro de las 72 horas de la situación de riesgo y tomar por 28 días. En el caso de personas con capacidad de gestar también se debe brindar la anticoncepción hormonal de emergencia (pastilla del día después).
¿Cómo acceder a la PEP? Llamá o acercate a la guardia más cercana o al servicio que tengas disponible según tu cobertura de salud. Allí un profesional evaluará la situación y te indicará los pasos a seguir. Todas las prepagas, obras sociales y guardias deben brindarla gratis, inmediatamente y de forma confidencial.
¿Puede usarse periódicamente? Sólo debe usarse en situaciones de emergencia. No reemplaza al preservativo como método de prevención.
¿Qué pasa si en mi obra social o prepaga no me brindan el servicio de forma urgente?
Paso 1: Ir a cualquier guardia del sistema público para pedir el tratamiento.
Paso 2: Realizar el reclamo correspondiente en tu cobertura.
Paso 3: Si niegan esta cobertura, hay que comunicarse con la Superintendencia de Servicios de Salud 011 4344-2800 o 0800-222-72583.
Paso 4: Ante cualquier duda es posible llamar a la línea gratuita del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable 0800 222 3444 o al Ministerio de Salud de la Nación 0800 333 3444.