Los hombres de baja estatura son los más celosos de sus parejas. Algo parecido pasa con las
mujeres: lo son si son muy altas, bajas y rellenitas. Esta es la principal conclusión de un estudio
realizado por las Universidades de Groginga (Holanda) y de Valencia (España). Algunas pistas para
enfrentar los celos, un sentimiento que revelan a diario quienes escriben al
Correo Sentimental de
LaCapital.com.ar.
La investigación encarada por las dos universidades europeas partieron de la hipótesis de que
los hombres altos tienen "novias más atractivas y un mayor éxito reproductivo porque son los
preferidos por las mujeres". Lo que no se sabía era si la altura tenía alguna relación con los
celos.
Los resultados dejaron en claro que "los varones altos pueden tener menos razones para ser
engañados por sus parejas", dado que por "su estatus de dominio pueden disuadir con más éxito a los
rivales de competir por sus compañeras".
En el caso de las mujeres, serían las de una altura intermedia las menos celosas en sus
relaciones. Y entre las altas y las bajas, estas últimas serían las que tienen más celos de las
rivales, "puesto que las primeras siempre tienen la ventaja física a la hora de luchar por su
pareja, como se ha demostrado en las sociedades poligámicas".
El estudio mostró además que "los hombres más bajitos eran más celosos si el rival los mira por
encima del hombro". Pero, entre las mujeres de estatura media la situación es diferente: "Son poco
celosas ante una rival más atractiva, pero pueden sacar su sentimiento de posesión de la pareja si
se encuentran con una contrincante de alto estatus social o con un claro dominio físico sobre
ellas".
La investigación también demostró que los menos musculosos y las más rellenitas son quienes más
pelean por sus relaciones. Los resultados del estudio, del que participaron 549 encuestados
valencianos y 200 holandeses, fueron divulgados por la revista científica "Evolution and Human
Behavior".
Celos que crecen
"Hola Sofi!!!, espero que puedas ayudarme. Me llamo Gustavo tengo 28 años y hace 3 que estoy de
novio. No puedo hacer que de deje de celarme constantemente…", así comienza la carta que
Gustavo le escribió a Sofía Varini, quien responde el Correo Sentimental de *LaCapital.com.ar *
Historias como la de Gustavo se repiten, de una u otra manera, en varios de los mensajes que
llegan a este blog (puede leerse en este sitio). En todos los casos, lo que están en juego es la
confianza puesta en el ser amado.
Según explica el artículo "Los celos" (del sitio vivirenpareja.com) "como parte de la vida
amorosa de todos los individuos, los celos son sentimientos que provocan tanto goce como
sufrimiento". Así, en el matrimonio los celos pueden resultar útiles para mantener viva la energía
de la pareja, o bien ser una reacción de alerta ante un bajón amoroso.
Siempre el problema comienza cuando entra en escena "un tercero" que hace perder la ilusión que
se tiene de ser único y extraordinario en el mundo.
Los celos también se relacionan con la baja autoestima y la inseguridad; y manifestaciones de
egoísmo y desconfianza. Y esta es la parte negativa de estos sentimientos porque generan reacciones
emocionales negativas y necesidades de una demanda continua de aprobación.
Algunas pistas para evitar los celos
¿Qué hacer ante los celos de la pareja? Es la pregunta que hacía Gustavo al CS y comparten
muchos otros. Los especialistas sugieren algunas estrategias para tener a mano, tales como:
- Intente que se sienta seguro/a de su relación, mostrando lo bien que están juntos, pero sin dar
explicaciones de lo que hace constantemente.
- Aclare desde el principio cualquier situación que lo pueda llevar a crear una sospecha
más.
- No intente que reconozca que todo lo que le ocurre es por celos.
- Explíquele cómo se siente cada vez que lo espía o interroga.
- Pregúntele por qué no puede confiar en la pareja es que realmente hay amor.