Tres socios de Silvio Berlusconi fueron condenados a prisión ayer por un tribunal italiano que los encontró culpables de ayudar e incitar a la prostitución al proporcionar mujeres jóvenes a cambio de sexo pagado al ex primer ministro. Berlusconi ya había recibido una condena de siete años de cárcel y la prohibición de ejercer cargos públicos en un juicio relacionado por pagar a cambio de sexo con la ex bailarina de un club nocturno Karima El Mahroug, conocida como "Ruby rompecorazones", cuando era menor de edad.
El veredicto de ayer se suma a las preocupaciones legales de Berlusconi y complica la situación de la frágil coalición de gobierno, formada por partidos de derecha y de izquierda, cuya supervivencia depende del partido Pueblo de la Libertad (PDL) de Berlusconi.
El tribunal de Milán condenó a los agentes de espectáculos Lele Mora y Emilio Fede, ex presentador de uno de los canales de televisión de Berlusconi, a siete años de cárcel cada uno por ayudar a reclutar jóvenes, entre ellas "Ruby". Nicole Minetti, ex higienista dental que luego se convirtió en asesora regional del partido PDL de Berlusconi, fue condenada a cinco años de cárcel. Los tres han negado haber cometido delitos y sus sentencias no serán definitivas hasta que dos apelaciones se completen. "Ruby" también negó ser una prostituta o haber tenido sexo con Berlusconi, de 76 años, pero dijo que asistió a fiestas en su residencia palaciega cerca de Milán, donde recibió miles de euros.
El caso de Ruby se ha convertido en el centro de una tensa batalla en la que Berlusconi, líder del principal partido de centroderecha de Italia, y sus seguidores han acusado a los fiscales de intentar destruirlo por razones políticas. En el veredicto, el tribunal de Milán pidió a los fiscales que investiguen si Il Cavaliere y otras 30 personas, incluyendo a sus abogados, deberían enfrentar cargos por la evidencia obtenida en el caso. En el caso de Berlusconi, esto podría involucrar el hecho de influenciar testigos.
"Cenas elegantes". Los abogados de Berlusconi, Piero Longo y Niccolo Ghedini, dijeron en un comunicado que habían recopilado declaraciones de testigos de una manera justa y transparente durante su propia investigación del caso, rechazando las acusaciones de un posible mal accionar como algo "absurdo". Los fiscales han presentado evidencia describiendo escenas que involucran a mujeres jóvenes haciendo actos de desnudismo e interpretando bailes pornográficos en las fiestas de Berlusconi, conocidas como "bunga bunga", y siendo recompensadas con sobres repletos de dinero.
Berlusconi dice que sus fiestas eran cenas elegantes y varios testigos confirmaron esa versión en la corte. Pero algunas de las jóvenes que asistieron a las fiestas, en su mayoría mujeres que querían conseguir trabajo en uno de los canales de televisión del ex premier, testificaron en su contra. "Logré recuperar parte de mi dignidad", dijo una de ellas, Chiara Danese. "Espero ser un ejemplo para las chicas que como yo tenían un sueño", agregó.
Para la Justicia tanto Minetti como Fede y Mora sabían que Ruby era menor. El procurador los comparó con "catadores de buenos vinos" para seleccionar a las chicas y gracias a esa labor obtenían muchas ventajas financieras de Berlusconi "pues conocían todos sus secretos" sobre sus festines en su mansión de Arcore. "Hacían una especie de examen para evaluar las capacidades socio-relacionales de las jóvenes, luego las introducían en el circuito de las veladas", sostiene el fiscal.
Para la acusación, Minetti también participaba activamente en las fiestas y "realizaba actos sexuales pagados".