El escándalo que rodea por estos días al premier italiano Silvio Berlusconi parece no encontrar un techo.
El escándalo que rodea por estos días al premier italiano Silvio Berlusconi parece no encontrar un techo.
Ahora, según el diario La Stampa de Turín, el premier estaría bastante "nervioso" por la existencia de fotos que Patrizia D'Addario tomó durante la noche que pasaron juntos en la residencia del jefe de gobierno.
El diario señala que hay fotos "picantes y comprometedoras" tomadas por D'Addario, que podrían comprometer aún más la reputación del premier.
De hecho, "Il Cavaliere" ya habría hablado con su abogado para frenar la publicación de las mismas, consigna el periódico.
Patricia D'Addario ya aportó cintas grabadas y un video realizado con su teléfono celular a la fiscalía de Bari.
En el video se ve un dormitorio del Palazzo Grazioli, donde está la cama grande que el líder ruso Vladimir Putin le regaló a Berlusconi.
Más grabaciones: "Berlusconi no usa preservativos"
En tanto, el semanario "L'Expresso" publicó nuevas grabaciones de conversaciones de la prostituta de lujo con el primer ministro italiano, entre ellas una en la que un amigo informa a la meretriz de que el líder italiano no usa preservativo.
Las conversaciones, grabadas por la propia D'Addario en dos fiestas celebradas en el palacio Grazioli, la residencia romana de Berlusconi, provocaron la amenaza de tomar medidas legales por parte del abogado del primer ministro Niccolo Ghedini, tras la publicación de las primeras transcripciones.
Los documentos sonoros colgados por L'Expresso en su página web, que están en posesión de la Fiscalía de Bari, recogen las voces de D'Addario, la de un hombre que el semanario atribuye a Berlusconi y la de Giampaolo Tarantini, el empresario que procuraba mujeres para las fiestas del primer ministro.
En las conversaciones, Tarantini avisa a D'Addario de que Berlusconi no usa preservativo, a lo que la prostituta protesta y pregunta: "¿Cómo me fío?"
El empresario contesta: "Pero...es Berlusconi".
Otra grabación recoge, según L'Expresso, la conversación entre el primer ministro y D'Addario durante el desayuno, tras una fiesta en el palacio Grazioli, la residencia romana de Berlusconi.
En ella, D'Addario le dice a Berlusconi que "al principio" le ha hecho "muchísimo daño" y él le contesta: "Venga yaaa, no es verdad".
Después, Berlusconi le pregunta su apellido y ella le entrega una tarjeta de visita en la que el primer ministro lee en voz alta el apellido de la prostituta, D'Addario.
En las últimas dos grabaciones Berlusconi se pavonea de su papel en la política internacional, asegura que es el "responsable del organismo internacional que gobernará la economía del mundo" y alaba la herencia artística de Italia.
En medio de la polémica, el Senado italiano rechazó una moción de la principal formación de la
oposición, el izquierdista Partido Demócrata (PD), para regular el comportamiento privado de la
figura del primer ministro, en referencia implícita al escándalo provocado por las grabaciones de
D'Addario.