El ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, se refirió al homicidio de Fernando Báez Sosa ocurrido en Villa Gesell, por el cual están detenidos e imputados diez jóvenes jugadores de rugby.
El ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, se refirió al homicidio de Fernando Báez Sosa ocurrido en Villa Gesell, por el cual están detenidos e imputados diez jóvenes jugadores de rugby.
—¿Qué reflexión hace sobre lo ocurrido en Villa Gesell y lo que puede hacer la escuela sobre el tema?
—Hay que hablarlo. Hace poco lo dije y generó algún tipo de rispideces en algunos sectores marcados por la intolerancia. Creo que son cuestiones que hay que hablarlas. No hay una única herramienta que permita el abordaje de esa problemática. Lo que sí merece una reflexión es que, frente a estos hechos, siempre miramos a la escuela. Y es justo que así lo hagamos. Pero cuando miramos a la escuela también implica que le tenemos que dar mucho más a la escuela. Le tenemos que dar sostenimiento de las políticas, formación de nuestros maestros y procesos de inversión. Creemos que tiene que haber un abordaje en la escuela. Creo que la violencia desplegada en Villa Gesell se vincula también a una violencia machista, a estos estereotipos de machismo que están impregnados en nuestra sociedad. Parte del desafío para romper con ese estereotipo es la responsabilidad que tiene la escuela de respeto al otro, de la valoración positiva de la diversidad en sus más amplias expresiones, desde la diversidad sexual, de origen, social y la ruptura de estos procesos de violencia que están intrínsecos en ciertos sectores de nuestra sociedad. Parte del desafío lo tiene que asumir la escuela, como también la problemática relacionada a los consumos problemáticos como el alcohol, que no se le da la centralidad que se le debería dar como a otros consumos problemáticos. Me parece que ahí nuestra escuela tiene una responsabilidad primaria y es un desafío que asumimos desde nuestra gestión. Y una de las herramientas que se vinculan a trabajar sobre la violencia machista es la aplicación de la ESI en el aula. Por más que a ciertos sectores no les guste comprenderlo, la ESI es mucho más que educación sexual vinculada al respeto del cuerpo, a la mirada tradicional de la educación sexual. También es una herramienta de lucha contra toda expresión de violencia, intolerancia y discriminación. Es una mirada mucho más amplia que ciertos sectores reaccionarios parece que no logran comprender y piensan que la educación sexual tiene un vínculo retrógrado vinculado a lo reproductivo.
—Bueno, incluso está ese eslogan que dice "con mis hijos no te metas".
—Bueno, pero me parece que tenemos que ser conscientes de los enormes beneficios que tiene la ley de educación sexual integral y cómo también ha permitido que a partir del respeto de la niñez y al cuerpo de cada chico y chica, se han podido detectar muchísimos casos de abusos a niños y niñas que en la inmensa mayoría son intrafamiliares. Entonces, ahí también la ESI es una herramienta fundamental para darle visibilidad a una problemática subterránea y escondida. Y ese es un rol del Estado que nosotros debemos asumir.
Por Lucas Ameriso
Por Facundo Borrego