El gobierno nacional flexibilizó las trabas a las importaciones y favoreció a la Municipalidad de Rosario. El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, autorizó a un concesionario local a ingresar al país cerca de mil lámparas LED para semáforos que serán colocadas en arterias de alta densidad vehicular. Esta semana se inicia el reemplazo de 988 lámparas en las avenidas Wheelwright, del Huerto, de la Costa, Belgrano, y las calles Santa Fe y Córdoba. "Es una buena noticia, pero todavía falta que lleguen 15 mil ópticas más", planteó Clara García, titular de la Agencia de Seguridad Vial.
La tecnología LED (por sus siglas en inglés, que en español significa Diodo Emisor de Luz) que Nación permitió importar, se produce a baja escala en el país y por eso encarece los costos.
El concesionario del mantenimiento de semáforos de la ciudad (Telvent) gestiona a diario el ingreso de este tipo de lámparas y recibe de la Aduana una "observación", que no constituye un rechazo pero tampoco vehiculiza su adquisición.
García remarcó que estas lámparas para los semáforos son "sustentables para el medio ambiente por su menor consumo energético y mayor durabilidad".
"Además —agregó— no generan el "efecto fantasma" cuando el sol se encuentra en contraposición al automovilista, ni encandilamiento. Y otras de las virtudes es su inalterabilidad de colores, lo que aumenta la seguridad vial".
Actualmente, de las 20.954 lámparas que se utilizan en el sistema de semaforización local, sólo 4.850 son de tecnología LED.
Desde esta semana y durante los próximos 25 días se sumarán 988 ópticas más. La Dirección de Ingeniería de Tránsito decidió emplazarlas en avenidas de gran transitabilidad como Wheelwright, del Huerto, de la Costa, Belgrano, y las calles Santa Fe y Córdoba.
Los trabajos apuntan fundamentalmente a las lentes de 300 milímetros, que corresponden a los semáforos ubicados en el brazo de las columnas altas. Esos dispositivos son los que mejor se visualizan, se ubican en arterias de alta densidad vehicular y demandan mayor trabajo, con equipos en altura.
"Es una buena noticia que destraben esta partida de lámparas, pero tenemos más de 15 mil a la espera de autorización para que el sistema de semaforización de Rosario sea más sustentable, eficiente y potencie la seguridad vial", advirtió García.
Más problemas. La funcionaria recordó que, en años anteriores, la Municipalidad cambiaba un promedio de 500 lámparas incandescentes por mes, cifra que se elevó a más de 2.800 unidades mensuales cuando debieron reemplazarse por halógenas, de menor vida útil.
Los inconvenientes se notaron con fuerza en el verano cuando decenas de esquinas semaforizadas sufrieron desperfectos. Y en algunos cruces hasta se pudieron ver luces celestes.
En aquel entonces García explicó: "Estamos haciendo pruebas para tratar de suplir las luces que están quemadas y no podemos ingresar porque está trabada la importación. Las lámparas LED emiten una luz más blanquecina, pero éstas que colocamos no, y en combinación con la óptica de los semáforos, que son de color azul, dan esta tonalidad celeste".
Ayer la funcionaria aclaró que "si bien este reemplazo no le genera un costo al municipio, ya que por contrato le corresponde afrontarlo al concesionario, permitir la utilización de tecnología LED a escala es clave por el alto costo y consumo energético que implica ese recambio incesante e improductivo", reforzó.
En enero, la Intendencia había reemplazado 810 lámparas por nuevas ópticas LED en las avenidas Presidente Perón, Francia, Ovidio Lagos, Uriburu, San Martín, Pellegrini, del Rosario, Arijón y Ayacucho, y los bulevares 27 de Febrero, Avellaneda y Oroño.
Durante la concesión del servicio, está previsto que Telvent complete el recambio de todas las ópticas incandescentes a LED. en el sistema de semaforización.
Otros pedidos en espera
Aún hay varios pedidos de importación formulados por el municipio que esperan autorización. Están frenados en la Aduana y afectan la prestación de los servicios públicos en la ciudad. Tarjetas con chip para pagar el estacionamiento medido, controladores de tránsito para conectar esquinas semaforizadas con el centro de monitoreo, contenedores y camiones con carga lateral para la recolección de residuos, entre otros, no pueden llegar a Rosario.