El martes por la tarde Francisco se despedirá de Cuba y emprenderá vuelo rumbo a Washington, capital de Estados Unidos, donde el miércoles a la mañana recibirá la ceremonia de bienvenida y mantendrá un encuentro con el presidente Barack Obama en la Casa Blanca. Por la tarde, presidirá la misa de canonización de Junípero Serra en la Basílica de la Inmaculada Concepción.
El jueves a la mañana Francisco hablará en el Congreso de Estados Unidos y visitará la iglesia de San Patricio, en tanto que a la tarde partirá desde la base militar Andrews hacia Nueva York donde arribará a las 17, luego de una hora de vuelo, al aeropuerto internacional John Kennedy.
El viernes visitará temprano la sede de las Naciones Unidas donde hará su discurso ante la Asamblea General y más tarde visitará el Museo del 9/11, World Trade Center.
Por la tarde, antes de la misa en el Madison Square Garden, programada para las 18, como un agregado tardío a la agenda se incluyó una procesión del Papa por el Central Park, en un recorrido de 12 cuadras a lo largo del West Drive, una de las avenidas que bordea el gran parque neoyorquino.
Estar entre los 80.000 neoyorquinos que ganaron una lotería para tener un lugar en la ruta que seguirá la caravana del Papa Francisco a través de Central Park significará largas colas, medidas estrictas de seguridad y horas de espera antes del arribo del pontífice. Y no se les permitirá traer sillas, mantas refrigeradores portátiles ni paraguas.
Para Suleyma Cuellar, que consiguió boletos para ella y su madre, valdrá la pena siquiera para tener una vista fugaz de Francisco.
“Es como ver pasar a Jesús”, dijo la veinteañera, que enseña robótica en una escuela de East Harlem.
Diana Torres, del barrio de Queens, dijo que se sintió bendecida al saber que había obtenido su boleto. “Tenía tantas ganas de ir, lo pedí, le puse mi nombre, recé”, dijo.
La catequista de 53 años dijo que eligió como su acompañante a la novia de su hijo, algo que no todos en su familia aprobaron.
“Alguien en mi familia se sintió muy mal... pero yo me siento bien”, dijo Torres.
La polémica en torno a los boletos no se limita a los familiares furiosos. La lotería fue solamente para residentes del estado de Nueva York, y apenas se publicaron las listas de ganadores, empezaron a aparecer avisos en los sitios de venta online eBay y Craigslist que ofrecían pares de boletos por cientos e incluso miles de dólares.
“Tratar de revender los boletos y obtener ganancias de su presencia en Nueva York es contrario a todo lo que representa el Papa Francisco”, dijo el cardenal Timothy Egan en un comunicado.
Los que acudan deben cumplir una serie de normas, incluido entrar a la zona por las puertas de seguridad indicadas. El inicio de la procesión está previsto para las cinco de la tarde, pero las puertas abren a las 11 y cierran a las 15,30.
Se puede llevar botellas de agua y alimentos, cámaras de fotos y carritos de bebé. Y punto. La lista de artículos prohibidos incluye bebidas alcohólicas, bolsas grandes, carteles, bastones para selfies y drones.
A Violeta Celaj, nutricionista y estudiante de enfermería, le parece perfecto. Ella piensa llegar a las siete u ocho de la mañana con su provisión de agua y meriendas.
“No tengo palabras para expresar lo que significaría” ver al Papa, dijo. Cuando supo que tenía boleto, se puso a gritar de júbilo. “Es mejor que la lotería”, dijo Celaj.
Fin de semana. El sábado 26 el Papa hará algunas horas en Nueva York y Filadelfia. En realidad saldrá temprano, minutos antes del las nueve, hacia Filadelfia desde el aeropuerto internacional John Kennedy. En menos de una hora estará en Filadelfia donde a las 10,30 tiene programada una misa en la catedral Basílica de los Santos Pedro y Pablo. Por la tarde visitará el Independence Mall y más tarde irá al Festival de Familias en la Benjamin Franklin Parkway.
El domingo, por la mañana, tendrá un encuentro con obispos en la capilla de San Martín, seminario de San Carlos Borromeo, a las 11 visitará la prisión Curran-Fromhold y a las 16 presidirá la misa de clausura del Encuentro Mundial de Familias. A las 20 partirá de regreso hacia Roma.