Los empresarios más poderosos arremetieron contra el gobierno durante el encuentro de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), una entidad que nació en 2002 para reclamar la protección estatal en medio de la crisis de aquellos años. Los dueños de las principales corporaciones rechazaron el proyecto para gravar la renta inesperada obtenida como consecuencia de la guerra, pidieron cortar el gasto y se permitieron bromear sobre la inflación. “Remarco precios todos los días”, desafió el titular de La Anónima, Federico Braun, desatando la celebración del auditorio. El presidente Alberto Fernández lo señaló: “Esta es la cara de la remarcación de precios”, dijo.
El encuentro de la AEA fue organizado en el hotel Sheraton para conmemorar los veinte años de su fundación. La entidad nació en tiempos de crisis, cuando algunos de sus miembros pedían declarar a los medios de comunicación como bienes culturales para evitar que los compraran a precio de regalo. Paolo Rocca, de Techint, Héctor Magnetto (Clarín), Luis Pagani (Arcor) y Federico Braun (La Anónima), llevaron la voz cantante. Todos comparten, entre otras cosas, el poder de decisión en sectores que aumentaron sideralmente los precios en el último año: chapa, insumos difundidos, telecomunicaciones, alimentos, productos de consumo masivo.
Luego de varias idas y vueltas, el gobierno presentó un proyecto para cobrar una alícuota extra del impuesto a las ganancias sobre las sociedades que facturen más de mil millones de pesos anuales y hayan experimentado un salto fuerte de su utilidad como consecuencia de la variación de precios derivada de la guerra en el Mar Negro.
El presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, lo presentaron el lunes. El martes, el presidente de AEA, Jaime Campos, abrió el encuentro con una sentencia: dijo que el proyecto era un “retroceso”.
Poco antes, Fernández había defendido la iniciativa en un mensaje grabado. Reiteró el pedido al Congreso para que sancione la ley y pidió a los empresarios “responsabilidad en un contexto de guerra”.
Sobre el cierre, y en forma presencial, Guzmán completó la defensa. “No es un nuevo impuesto sino una sobre alícuota de un año de guerra que ha generado un gran problema distributivo en todo el mundo”, enfatizó. Y recordó que “hay otros países que ya votaron” iniciativas similares, como Italia y Gran Bretaña.
El ministro destacó la sostenibilidad fiscal como “un activo para toda la Nación” y relativizó las críticas a una supuesta elevada presión tributaria lanzada por los empresarios que lo precedieron en el uso de la palabra y dijo que en el país “en promedio, es más baja que en la Ocde”.
En el medio, casi todos los trescientos invitados, entre los que había muchos ex funcionarios del gobierno Mauricio Macri, se embriagaron de críticas al gobierno.
Magnetto cargó contra el internismo y la “relativización persistente de las reglas de juego básicas de la democracia capitalista”. Rocca reclamó avanzar rápidamente con el gasoducto Néstor Kirchner, al que le proveerá los tubos. Pero el clímax llegó cuando el titular de la cadena de supermercados La Anónima, Federico Braun, aseguró que “remarca precios todos los días” y se manifestó defensor de la “absoluta libertad de precios”.
¿Qué hace su supermercado, la segunda mayor cadena del sector, con la inflación?, le preguntaron. El empresario contestó jocoso y acompañado de la risa de los asistentes: “Remarca precios todos los días, para ser sinceros”.
“Nosotros decimos que no somos formadores de precios. Eso es una pequeña mentira porque somos formadores en una parte. En realidad, trasladamos cuando podemos trasladar”, aseguró Braun.
Al toque, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner tuiteó: “El dueño de una de las cadenas de supermercados más grande del país te cuenta lo que hacen todos los días”.
Tiempo después, el presidente dijo: “La inflación autoconstruida no es otra cosa que la remarcación de precios, si querían conocer la a cara de la remarcación de precios la tuvieron en AEA”.
En el auditorio, quedaron intercambiando sonrisas empresarios y ex funcionarios macristas.