La actividad económica de Santa Fe cayó 1,1% interanual en mayo y consolidó la fase recesiva, según indicó el Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe (BCSF).

Foto: Archivo / La Capital.
El de empleo es uno de los indicadores que "aguanta" el panorama recesivo, dijo la BCSF.
La actividad económica de Santa Fe cayó 1,1% interanual en mayo y consolidó la fase recesiva, según indicó el Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe (BCSF).
La entidad elabora el Indice Compuesto de Actividad de Santa Fe (Icasfe), que permite monitorear a partir del seguimiento de una serie de variables, la marcha de la economía de la provincia. La variación mensual fue negativa en un 0,3%.
“Luego de un año de iniciada la actual recesión, la situación macroeconómica nacional y la sequía que experimentó la región agudizaron la tendencia”, dice el informe de la Bolsa.
Las series con variación mensual positiva fueron las siguientes: recursos tributarios: 0,5%; puestos de trabajo: 0,3%; remuneraciones reales, 0,2%; y ventas en supermercados: 0,1%; En tanto, registraron caídas las siguientes series: producción industrial (-1,3%), patentamiento de vehículos (-2,1%), consumo de cemento (-2,2%) y demanda laboral (-5,9%).
Este escenario, señalaron los economistas de la Bolsa, responde fundamentalmente a “una propagación negativa que afecta al sector industrial en general, y agroindustrial en particular, producto del desfavorable contexto macroeconómico nacional, así como de la importante sequía que experimentaron las principales zonas productivas del país”. Adicionalmente, también se estancaron las mejoras que venían mostrando los indicadores de consumo durable.
Entre los componentes que aún amortiguan la amplitud de la recesión, se destaca el comportamiento de la serie correspondiente a los puestos de trabajos registrados, la cual presenta un continuo crecimiento a pesar del contexto recesivo. De acuerdo a datos informados por fuentes oficiales, esta situación estuvo apoyada por sectores de la industria, el comercio y los servicios, al menos, hasta el primer trimestre del año.
Por su parte, la masa de remuneraciones totales acumula en el último año una variación prácticamente nula.
En tanto, la Universidad Austral señaló que la producción primaria de la Región Centro acusó en mayo el impacto esperado por la sequía, especialmente en la producción de leche y en la de derivados de la soja. “En conjunto, sólo seis de los once indicadores mostraron en marzo pasado un crecimiento interanual en la producción, destacando el aumento en la producción de bioetanol, la demanda comercial e industrial de electricidad y la faena vacuna, porcina y aviar, fundamentalmente por la necesidad del productor de deshacerse de éstos a raíz de la sequía y el consecuente encarecimiento de los forrajes. Impresiona, aunque no sorprende, el estancamiento de la producción de leche en las cuencas lecheras más grandes del país”, dijo.
La economía local, medida por el Indice Local del Ciclo Económico de la Austral, acumula una contracción de 0,3% al mes de mayo. En este último mes, la caída fue de 1,6% interanual. Con todo, la baja es menor a la del total del país, medido por el Emae.
En el primer trimestre se crearon 127 mil puestos de trabajo respecto del año anterior y 7 mil personas dejaron de ser desocupadas.


