Temores y desafíos en el paso del secundario a la Universidad

Trabajar, estudiar y concretar otros proyectos figuran en las expectativas del 70 % de los chicos que terminan el secundario. El dato, difundido el año pasado por la Asociación de Profesionales de la Orientación Vocacional (Apora), confirma la importancia de esta etapa de estudios para afianzar en cientos de jóvenes el entusiasmo por continuar una formación superior.

Según los datos arrojados por esta encuesta nacional sobre "Las elecciones vocacionales de los jóvenes escolarizados" (que tuvo su referente regional con resultados muy similares), el 65 % se manifiesta propenso a seguir en la Universidad, en tanto que un 14 % un estudio no universitario. Y en la nómina de carreras más elegidas siguen privilegiándose por los jóvenes las tradicionales como contador público, medicina, arquitectura o abogacía.

Este es el caso de Carla Ranciari, que tiene 18 años recién cumplidos y ya comenzó su primer año de abogacía en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario (UNR). "Siempre quise ser abogada, me veo trabajando en esta profesión, siempre me interesó saber sobre las leyes", dice muy segura Carla a La Capital.

"En mi familia no hay abogados ni nadie me insistió para que estudie derecho", dice la alumna de la UNR para afirmarse en la elección de su carrera motivada por una vocación personal.

  Experiencia educativa

Pero para Carla lo novedoso este año son los cambios que le plantean la vida universitaria: "Ahora tengo que estudiar más, los textos son muchos más extensos que los que tuve que ver en la escuela secundaria, al menos en el último año". A lo que suma compartir comisiones de 80 estudiantes.

Es en este paso de la escuela media a la Universidad o a los estudios superiores, donde está para muchos alumnos el mayor desafío. Otros tiempos de estudio, formas de relacionarse con el ámbito académico, organizarse para cursar y trabajar son para muchos jóvenes desafíos cotidianos para sostenerse en la carrera elegida.

De acuerdo con un estudio sobre la percepción de los jóvenes y docentes sobre la escuela secundaria, dirigido por la pedagoga Inés Dussel y conocido como "Más allá de la crisis", los alumnos expresan temores sobre qué pasará al final de su escolarización.

Dice el trabajo de Dussel, que "los jóvenes entrevistados manifiestan miedo a no adaptarse o miedo a tener que ver volver atrás, mientras muchos otros no saben qué van a seguir". También indica como dato interesante para quienes emprenden una formación que "el mundo del estudio asusta más que el del trabajo, aunque esté dotado de más gratificaciones".