Funcionarios de la provincia, del municipio y legisladores volvieron a reunirse ayer por la mañana para analizar el destino del Hospital Regional Rosario Sur. La obra lleva casi tres años paralizada y en los últimos meses la estructura de hormigón y vidrio fue varias veces vandalizada. El encuentro sirvió para analizar algunos datos sobre la demanda de atención de la salud en el sur provincial y poner al día la inversión necesaria para las próximas etapas del proyecto. Desde el gobierno santafesino buscan financiación nacional.
La de este martes fue la segunda reunión convocada por el Ministerio de Salud de la provincia para analizar la situación del centro asistencial de barrio Las Flores.
La construcción comenzó en junio de 2011, durante la gestión socialista, con el objetivo de posicionarse como un centro de salud de alta complejidad para todo el sur provincial. Pero apenas se alcanzó a concretar un 20 por ciento de la obra.
Tras la pandemia, advierten desde Salud, los modelos de atención sanitaria se modificaron a partir de la experiencia del coronavirus, tanto como las demandas de los usuarios del sistema.
Según explicó el director provincial de calidad, regulación y fiscalización en el tercer nivel de atención, Rodrigo Mediavilla, el objetivo de los encuentros es "pensar cuál será el perfil sanitario de ese efector para darle una mejor respuesta a las necesidades de la gente".
Según repiten desde la cartera de Salud, se trata de definir qué políticas sanitarias hacen falta en el sur provincial que puedan atender la demanda insatisfecha de la población y, sobre todo, trazar objetivos que trasciendan las distintas gestiones.
Lo que falta
De la reunión participaron también la secretaria de Arquitectura y Obras Públicas de la provincia, Leticia Battaglia, la subsecretaria de Salud de la Municipalidad, Silvia Marmirolli, la presidenta de la comisión de Salud de la Cámara de Diputados de la provincia, Silvia Ciancio, y el senador por el departamento Rosario Miguel Rabbia.
Battaglia fue la encargada de repasar el estado del proyecto. Según detalló, la provincia ya contrató a una consultora para elaborar el plan definitivo con vistas a dotar al futuro efector de cloacas. La obra permitirá llevar el servicio a siete barrios y, de acuerdo a los cálculos de la provincia, tendrá un costo de unos 7 millones de dólares.
En paralelo, explicó, se está haciendo el proyecto ejecutivo para extender el tendido eléctrico y garantizar la potencia que demandará el futuro centro de salud. En esa línea se empezó a trabajar con la Empresa Provincial de la Energía (EPE) y estiman que los trabajos insumirán otros 6 millones de dólares.
"Esos son los dos servicios básicos que se necesitan para tener el hospital en marcha. Sin esos servicios no hay hospital", apuntó la funcionaria, aunque aclaró que "desde Obras Públicas lo que hacemos es poner ladrillos, lo que necesitamos es que se consensúe un proyecto sobre cual va a ser el funcionamiento" del centro asistencial.
La funcionaria adelantó también que la provincia está haciendo gestiones en busca de que el gobierno nacional financie las próximas etapas de la obra. Según trascendió, hasta ahora Nación habría comprometido un aporte de 1.500 millones de pesos.
Battaglia confirmó también que mañana se firmará el contrato para realizar un cercamiento al obrador, mejorar la iluminación y colocar un sistema de videovigilancia, con el objetivo de prevenir los robos y hechos de vandalismo que se registraron en los últimos meses y afectaron gran parte de los cerramientos de vidrio y aluminio del futuro hospital de zona sur.
Un nuevo perfil asistencial
El senador por el departamento Rosario, Miguel Rabbia, fue uno de los voceros del encuentro. "Estamos trabajando en cómo generar un mejor perfil asistencial para el hospital, que atienda las necesidades instaladas en esta comunidad y en toda la red de salud regional", sostuvo.
El médico confió en el trabajo conjunto de funcionarios de salud de provincia y municipio, de obras públicas y legisladores provinciales para definir las características y los servicios que prestará el nuevo efector de zona sur.
El plan, consideró, demandará una inversión varias veces millonaria. "La estructura aún no tiene servicios. Hay que conectar la construcción a la red cloacal, lo cual va a requerir una inversión de algo mas de 7 millones de dólares y conseguir la suficiente potencia eléctrica para que el hospital pueda funcionar, por lo que habrá que invertir otros 6 millones de dólares, luego tenemos que seguir con la conexión de luz y gas. Son pasos que se tienen que ir haciendo y cuestiones que hay que ir resolviendo para que ese efector pueda brindar las mejores soluciones a los rosarinos, a un costo que se pueda soportar", concluyó.