Este viernes será el preestreno de la producción audiovisual de la Colonia Psiquiátrica de Oliveros que fue concretada junto al Ministerio de Salud y al de Innovación y Cultura del gobierno de Santa Fe. La película fue rodada íntegramente en la localidad de Oliveros y contó con la colaboración y actuación de los vecinos del pueblo, pacientes y trabajadores de la colonia.
La idea y realización general de esta documental con ficción estuvo a cargo de Sandra "Gandharí" Benigno, Hernán Camoletto, Roberto Chanampa, Fernando Ferraro y Mara Graciosi.
La producción llamada "Oliveros, la película" se concretó luego de tres años de trabajo. El documental intenta sumarse a la discusión sobre la problemática del manicomio, al tiempo que procura acercar nuevas miradas en torno a la salud mental, el rol de la sociedad y la inclusión.
La película, de cerca de una hora de duración, se proyectará como avant premier este viernes, a las 20, en el predio de la Casa de la Cultura de la comuna de Oliveros. La función será al aire libre en un Cine Móvil. Los organizadores recomendaron a los asistentes llevar sillas. Asimismo se aclaró que en caso de lluvia la actividad se trasladará al Centro Nacional de Jubilados.
Al día siguiente, el filme se dará en la ciudad de Rosario, a las 18, en el cine público El Cairo. Se destacó que para esta ocasión las entradas podrán retirarse, a partir de las 17, en la sala de calle Santa Fe 1120, y que se entregará una por persona hasta cubrir la capacidad del espacio.
Asimismo, el lunes, a las 10, se hará una presentación en la Colonia Psiquiátrica de Oliveros. En todas las funciones, las entrada serán libres y gratuitas.
"El proceso en sí mismo ya cumple con parte del objetivo que nos propusimos, que era concentrarnos en construir vínculos entre el adentro y el afuera del hospital", aseguró Benigno, una de las realizadoras y parte del equipo que trabaja en el área cultural de la Colonia, donde se gestó el proyecto.
Se destacó que los lazos que pudieron construirse fueron a partir de usar a la película como puntapié inicial. La convocatoria fue abierta en 2013, tanto en la Colonia como en la comunidad del pueblo, y desde allí más de 100 personas se acercaron con la curiosidad y las ganas de participar.
Ley "desmanicomializante". El proyecto de filmar la película surgió por varios interrogantes de quienes integraban en 2013 el área cultural de la Colonia, por sus experiencias en el trabajo con los usuarios. Además, se inscribió en el marco de la ley de salud mental sancionada en 2010, que prohíbe la creación de nuevos establecimientos bajo el paradigma del manicomio y que en contrapartida promueve otro tipo de dispositivos, como las casas de convivencia o de "medio camino", estableciendo que para el 2020 deben dejar de existir los psiquiátricos, tal cual hoy los conocemos.
Cabe señalar que la génesis de estas primeras experiencias "desmanicomializantes", se remontan a más de 30 años atrás, en Trieste, Italia, de la mano de Franco Basaglia, y que también se han implementado en otros países, donde el cambio de paradigma en torno a la salud mental se ha dado con efectos muy positivos.
"El documental es un proceso colectivo, integrando en un mosaico, escenas actuadas, ensayos y entrevistas, donde los personajes ceden lugar a las personas y aparecen historias tanto o más ricas que en la ficción, una película dentro de otra película", mencionó Chanampa.
La historia. El relato de la película transcurre en la actualidad, en un pueblo de la provincia de Santa Fe. A unos kilómetros de la localidad, en el campo, se emplaza una colonia psiquiátrica. La historia comienza con un grupo de niños que buscando un lugar que les permita recrearse libremente y lejos de la mirada de los adultos, encuentran una tapera abandonada en el terreno de uno de sus padres. Pronto surge el encuentro con un grupo de pacientes de la colonia psiquiátrica que ha tomado el mismo espacio para hacer sus escapadas nocturnas con el fin de hacerse de un mínimo espacio de autonomía y libertad por fuera del control del hospital. El vínculo construido entre los niños y los pacientes vendrá a demostrar hasta dónde los discursos instituidos y las ideas que circulan a diario en torno a la locura, nos hacen olvidar cada vez más de aquello que es esencial al ser humano.
Avales y apoyos. El proyecto cuenta con el aval de la Dirección Nacional de Salud Mental, de la comuna de Oliveros y fue declarado de interés por la Cámara de Diputados y Senadores de la provincia. Además tiene el apoyo del Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad (Siprus) y del senador provincial Hugo Rasseto y de la diputada provincial, Alicia Gutiérrez.
Además se contó con la colaboración de la Cooperadora de la Colonia Psiquiátrica de Oliveros, el Colegio de Trabajo Social 2ª Circunscripción Rosario, la Biblioteca Popular José Pedroni, la comisaría de Oliveros, la Escuela primaria de Oliveros 239, el Instituto Superior Escuela Provincial de Teatro y Títeres Rosario 5.029, la Asociación Cristiana de Jóvenes de Rosario, filial Oliveros, el personal de la Colonia Psiquiátrica de Oliveros, la Asociación Argentina de Actores, Delegación Rosario, vecinos y comerciantes locales.