El presidente argentino, Alberto Fernández, dijo ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que el intento de magnicidio contra la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, "buscó alterar la virtuosa construcción colectiva" del país desde el regreso de la democracia, y advirtió que "los discursos extremistas y violentos" encontraron "tierra fértil" en los efectos causados por la pandemia de coronavirus y la guerra en Ucrania.
En su primera participación en la Asamblea General de la ONU, que se celebra en Nueva York, el presidente Fernández agradeció la “solidaridad que la Argentina ha recibido del mundo entero” por el intento de magnicidio perpetrado contra Cristina Kirchner, y dijo que eso “no solo afectó la tranquilidad pública” sino que también “buscó alterar una virtuosa construcción colectiva que el año entrante cumplirá cuatro décadas de vida”.
"Los argentinos construimos el acuerdo del «Nunca Más» al terrorismo de Estado y a la violencia política”, destacó el jefe del Estado, y remarcó: “Valoramos la democracia como un modelo de desarrollo social que exige respetar al otro en la diversidad”.
Dijo que está “seguro” de que “la violencia fascista que se disfraza de republicanismo” no conseguirá “cambiar ese amplio consenso al que adhiere la inmensa mayoría de la sociedad argentina” por la democracia, y apuntó que, “aprovechando la desazón que generó la pandemia y los efectos económicos de la guerra, los discursos extremistas y violentos proliferaron y encontraron tierra fértil para sembrar el sentimiento antipolítico en nuestras sociedades”.
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También advirtió que las naciones endeudadas “padecen mucho más los efectos del sistema establecido” que provoca desigualdades y manifestó que “Argentina está entre ellas”, por lo que agradeció “a todos los Estados que nos apoyaron en el complejo proceso de renegociación de nuestra deuda externa”.
“Es un endeudamiento que mi gobierno no generó pero que afronta con toda seriedad”, sostuvo.
Instó además a “trabajar unidos para imponer el diálogo y recuperar la paz” en la “disputa iniciada” por el avance militar “de la Federación Rusa sobre el territorio de Ucrania”, y resaltó: “Mientras buscamos alcanzar el horizonte de la pacificación global, debemos abandonar las prácticas económicas y financieras que el mundo desarrollado exige cumplir al mundo que intenta desarrollarse”, afirmó el jefe de Estado, quien dijo que “sostener este presente, solo incrementará la pobreza y la marginalidad”.
Fernández llamó a "garantizar la la seguridad alimentaria a todos los habitantes del planeta” y afirmó: “No podemos transitar este tiempo con hambrunas”.
“La Argentina cumplirá su rol como productor y exportador confiable de alimentos nutritivos y de calidad”, manifestó.
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Además, el presidente cuestionó la “utilización de medidas unilaterales de coerción” y volvió a reclamar el levantamiento de los bloqueos contra Cuba y Venezuela. “De acuerdo con la Carta de las Naciones Unidas, las únicas sanciones legítimas son aquellas impuestas por el Consejo de Seguridad para hacer cumplir sus decisiones en materia de mantenimiento de la paz y la seguridad. En virtud de ello, Argentina se suma al reclamo de los pueblos de Cuba y Venezuela para que se levanten los bloqueos que esas naciones padecen”, expresó.
También se refirió a la crisis climática del mundo, al pedir que sean “diferenciadas” las responsabilidades de los países y asegurar que América latina, el Caribe y África no ocupan “la primera línea de emisión de carbono”.
“Las responsabilidades definitivamente deben ser diferenciadas y ello exige aliviar en la emergencia el esfuerzo de quienes no fueron culpables”, expresó.
Finalmente, reafirmó los “legítimos e imprescriptibles derechos de soberanía” del país sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, y denunció que el Reino Unido “agravó la controversia” con una “injustificada y desmedida presencia militar en las islas” y con “llamados a la explotación ilegal de los recursos”, aunque expresó la disposición de Argentina a reanudar “negociaciones” con Londres.