Un suboficial de la policía rosarina fue baleado por tres hombres a los que
intentó detener cuando presuntamente cometían un atraco en una humilde vivienda del barrio Las
Flores. En el suceso también resultó herido el dueño de casa, quien recibió un corte en el cuello
con un cuchillo. Los asaltantes no se habrían llevado ningún elemento de valor aunque los
investigadores sostienen que la presencia de los delincuentes en la propiedad "tuvo una finalidad
precisa" que "las víctimas están ocultando".
Todo se inició cerca de las 18.40 del domingo en Las Flores Sur, una barriada
donde se mezclan casas de material con ranchos de chapas. A esa hora, Norma Viviana Alegre, de 24
años, se presentó en la subcomisaría 19ª y, desesperada, les dijo a los agentes que tres
desconocidos habían ingresado a su casa de Estrella Federal al 1700 por los fondos. En la vivienda,
según señaló, estaban su pareja, Horacio Bonelli, de 28 años, y sus hijas de 6, 7 y 11 años a
merced de los intrusos. "La mujer dijo que los tipos habían entrado por los fondos de la casa y que
ella había podido escapar", explicó una fuente policial.
Ante la denuncia, las autoridades de la subcomisaría dispusieron que tres
suboficiales, dos sargentos y un cabo, acudieran a la propiedad de Alegre. Apenas arribaron, los
uniformados se sorprendieron porque la puerta estaba cerrada por dentro y nadie respondía a los
pedidos de los efectivos para que abrieran.
Herido. "Los policías tuvieron que derribar la puerta para ingresar", explicó el
comisario Norberto Peyronel, jefe de la seccional de Las Flores.
Así, dos de los policías lograron entrar a la vivienda mientras que otro
efectivo escaló el techo. Una vez adentro, los uniformados distinguieron a Bonelli tirado en el
suelo y herido con un corte en el cuello. Mientras lo asistían, escucharon dos disparos de armas de
fuego. Entonces salieron al patio y escucharon un grito estremecedor. "Me dieron un balazo",
alcanzó a gritar el cabo César Canciani, de 34 años.
En ese momento, los policías levantaron la vista pero, según Peyronel, no
pudieron divisar a los agresores que, al parecer, escaparon por los fondos de la propiedad.
Canciani fue auxiliado por sus compañeros y, un rato después, una ambulancia lo trasladó al Centro
de Trauma y Emergencia del Sanatorio Parque. Allí, los médicos comprobaron que el balazo había
ingresado por la tetilla izquierda y le había perforado el intestino delgado. "Le tuvieron que
extirpar tres centímetros del intestino", explicó el oficial consultado.
Anoche, el suboficial estaba internado en la sala de terapia intensiva, pero su
vida no corría peligro. En tanto, mientras un portavoz policial indicó que Bonelli fue atendido en
el Hospital de Emergencias, una empleada de ese centro asistencial señaló a LaCapital que el
muchacho no había ingresado al Heca.
Dudas. Entre los interrogantes que se plantea la policía está el por qué los
ladrones no se llevaron nada cuando en el lugar había varios electrodomésticos y ante ello algunos
responden extraoficialmente que "se pueden haber llevado algo que los dueños de casa no quieren
declarar". Y, en ese marco, no descartan que el hecho esté vinculado a un ajuste por venta de
drogas.
Ayer al mediodía, los ocupantes de la casa de Estrella Federal al 1700 no
estaban. La puerta estaba cerrada con un candado y sólo asomaba una luz tenue desde el interior de
la vivienda. En la vereda, algunos vecinos decían que no sabían nada acerca del suceso.