Un hombre que pasó en moto disparó trece balazos contra el frente de una propiedad ubicada en Gorriti al 6400, en el corazón de barrio Ludueña. El hecho conmocionó al barrio y a la familia que ocupa esa propiedad, que no sale de su asombro.
Un hombre que pasó en moto disparó trece balazos contra el frente de una propiedad ubicada en Gorriti al 6400, en el corazón de barrio Ludueña. El hecho conmocionó al barrio y a la familia que ocupa esa propiedad, que no sale de su asombro.
Los integrantes de la familia aseguraron que quieren mudarse a otro barrio porque tienen miedo, y propusieron como alternativa que la justicia les ponga custodia para que no se repita esta situación.
Las huellas del ataque quedaron reflejadas en la pared de la casa, y en un auto y una chata que estaban estacionadas en la puerta de la propiedad baleada, donde vive un matrimonio con sus tres nenas.
Además de la brutalidad del ataque, la familia se encontró con una nota amenazante. "Ya te dejamos salir mucho al sol, comunicate con este número", rezaba el cartel escrito en birome que le dejaron los tiratiros y que la mamá de las nenas encontró en el piso.
El ataque se produjo alrededor de las 14 de este lunes, cuando una persona que se movilizaba en moto disparó al menos trece tiros contra la propiedad, de acuerdo a las vainas servidas que halló la policía.
"Para mí es un error, se equivocaron, porque nosotros no tenemos problemas con nadie", contó Débora, que ocupa la propiedad junto con su marido y sus tres hijas, de 18 meses, 7 y 9 años.
La mujer reclamó custodia porque tiene "miedo de que vuelva a suceder".
"No entiendo nada, porque nosotros no tenemos problemas con nadie", sostuvo, para agregar casi al borde las lágrimas: "Estoy poniendo en riesgo la vida de mis hijas y de mi marido".
Débora afirma ser ama de casa, el marido es mecánico y trabaja con el padre, que es el propietario de la chata que resultó baleada en el ataque y afirma no saber quiénes vivían en esa casa antes de que la ocuparan ellos.