Aumentan la pena a un subcomisario que mató a un docente
Ocho meses atrás, el subcomisario Alejandro Fabio Scalcione fue condenado por matar a su pareja, el profesor de historia Nelson Regaldo Rosso. En un juicio oral y público le impusieron 18 años de prisión.
28 de noviembre 2012 · 01:00hs
Ocho meses atrás, el subcomisario Alejandro Fabio Scalcione fue condenado por matar a su pareja, el profesor de historia Nelson Regaldo Rosso. En un juicio oral y público le impusieron 18 años de prisión por el delito de homicidio agravado por el empleo de arma de fuego. El fallo fue apelado por la fiscalía, los abogados querellantes y la defensa del policía. Ayer la Cámara Penal resolvió modificar la figura penal que le atribuyeron, valoró que el crimen fue cometido con alevosía y le impuso la pena de prisión perpetua.
Rosso, de 60 años, fue asesinado de dos disparos en su casa de Oliveros el 17 de abril del 2009. Tenía una relación de convivencia desde un año antes con Scalcione, que entonces tenía 45. Cuando ocurrió el crimen, el oficial era el jefe del destacamento policial del Hospital Clemente Alvarez. En la primera audiencia del juicio Rosso admitió que le disparó a Scalcione, a quien definió como un hombre celoso en extremo. Por primera vez mencionó que ese día hubo una tercera persona en el lugar: un hombre al que sorprendió yéndose apresurado subiéndose los pantalones. Nunca en todo el trámite había aludido a eso. Precisamente los jueces Carina Lurati, Ernesto Pangia y Alfredo Ivaldi Artacho consideraron "falaz" la alusión a la existencia de un tercer hombre en la escena previa al homicidio.
Por emoción violenta. Luis Tomasevich, el abogado de Scalcione, había solicitado, durante el debate penal, tres años de prisión, aludiendo al estado de emoción violenta en el que habría actuado su cliente frente a esa circunstancia. Adujo que se ponderaron conceptos jurídicos para plantear la "emoción violenta" y que dos psicólogos oficiales, que plantearon que su cliente no actuó bajo tal estado, "no manejan los mismos términos". Afirmó que "se descuidaron las pruebas, se contaminó el lugar de los hechos y este hombre actúo como lo hizo a partir de una situación de ahogo económico, de humillación y falta de salida a esta situación".
En su voto, la jueza Carina Luratti desestimó que Scalcione hubiese actuado abrumado por la situación angustiante que planteó la defensa. "No constituye una circunstancia excusable el sentimiento de frustración motivado porque no funcione una relación como uno lo tiene proyectado. Scalcione fue hasta la casa de Rosso decidido a matarlo sólo porque no había funcionado lo que él pretendía, o en la forma proyectada", sostuvo la camarista en un tramo del fallo.
En su apelación, el fiscal de Cámaras Guillermo Camporini había pedido que se lo condene al policía a prisión perpetua por el delito de homicidio calificado por alevosía agravado por el uso de arma de fuego. Y consideró que la figura de alevosía estaba determinada por la nocturnidad, el lugar descampado donde estaba ubicada la casa de Rosso y su estado de indefensión cuando ocurrió el crimen. El mismo encuadre penal y la misma sanción penal requirieron los abogados querellantes Ricardo Giusepponi y Raúl Superti.
La alevosía. Los integrantes del tribunal ponderaron que se probó "con certeza razonable" que el 18 de abril del 2009 Scalcione ingresó al Hospital de Emergencias y se retiró pasadas unas horas de su jornada a pesar de que debía cumplir su turno toda la noche. Tomó un colectivo hacia Oliveros y llegó a la casa de Rosso entre las 3.15 y las 3.30. Abrió la puerta de la vivienda con la llave que le había entregado el docente e ingresó sabiendo que en ese horario Rosso dormiría. Una vez adentro, para los camaristas, le disparó dos balazos cuando el profesor de historia estaba acostado en la cama.
"La alevosía no radica en cuándo fue realizado el disparo mortal porque no es éste un supuesto en el que el primer disparo lo hubiera dejado imposibilitado de defensa y la alevosía se configuraría en el segundo. Esta figura penal ha sido probada por el modo en que se cometió el homicidio desde el primer disparo", sostuvieron los camaristas.
A su vez, los jueces desestimaron un hecho que Scalcione señaló durante el debate penal: que el día del crimen encontró otro hombre en la casa de Rosso. En este punto advirtieron una incoherencia en el relato del subcomisario y recordaron que a los policías que acudieron a la escena del crimen no los comentó la presencia de este hombre. "Les dijo (a los uniformados) que «lo había matado porque me hizo endeudar y me echó como un perro. Este no jode más a nadie»". Luego cuando conducía a los policías al dormitorio donde yacía sin vida Rosso, les comentó "ahí está mi pareja".