Luego de la reunión en el Ministerio de Salud de la Nación entre las autoridades del gobierno con los representantes de las entidades y actividades privadas de la salud, como así los referentes de las obras sociales, se supo que el presidente Alberto Fernández no emitirá un decreto de necesidad y urgencia para disponer de los recursos hospitalarios del sistema privado ante el avance de la pandemia.
Durante el diálogo se ratificó que el Ministerio de Salud seguirá actuando como autoridad sanitaria a nivel nacional, no obstante coordinará la disponibilidad de recursos de manera consensuada, siendo los diferentes distritos los que harán la logística de la distribución de los mismos.
Lo resuelto contradijo de manera contundente lo que declaró horas atrás el propio ministro de Salud, Ginés González García, quien había anticipado el decreto presidencial para que el Estado interviniera de manera directa en la disponibilidad de los recursos de las clínicas y sanatorios privados.
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Los referentes del sector privado de la salud admitieron hoy la sorpresa y preocupación que despertaron los dichos del ministro, porque no estaba a tono con el diálogo, la disposición y la coordinación con las que venían desarrollando la relación con el gobierno nacional.
Al final de la reunión, Ginés González García dijo a través de un comunicado ministerial sentirse "muy satisfecho" por el compromiso asumido por todos los sectores de la salud en este tiempo de pandemia.
"Todos estamos comprometidos para tener el menor impacto posible en la salud de la población", reza otra parte del documento, en alusión a las clínicas y sanatorios, empresas prepagas, obras sociales y seguridad social.
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Tras la reunión todos se fueron con la convicción de que el mejor sistema sanitario para la Argentina se logrará con sintonizar mejor la coordinación entre el Estado, las provincias, los municipios y el sector privado para así garantizar que las urgencias sean atendidas con eficiencia.