El Poder Judicial prometió superar los esfuerzos iniciales en garantizar que se atiendan las denuncias por violencia de género y que se tomen las medidas previstas para proteger a las víctimas del agresor, según un cable de la agencia oficial Télam, en momentos en que crecen las demandas y cuestionamientos de los colectivos feministas.
Las cifras son preocupantes: en 29 días que transitó Argentina de aislamiento social, preventivo y obligatorio por coronavirus se registraron 14 femicidios en el país y aumentaron en un 60 por ciento los llamados de mujeres a la Línea 144 para pedir ayuda.
El último ocurrió el viernes a la noche: una mujer de 36 años fue asesinada de un escopetazo en la cara y por el crimen detuvieron a su ex pareja luego de que los vecinos de la víctima intentaron lincharlo, en el partido bonaerense de Florencio Varela. La víctima, identificada como Paola Pereyra, se encontraba junto a su actual novio y sus tres pequeños hijos cuando fue a atender a la puerta y su ex le disparó.
Ayer apenas trascendió el hecho, la ministra de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, Estela Díaz, destacó que "en plena pandemia, también estamos salvando vidas de mujeres ante la violencia familiar''.
La funcionaria del gobierno de Axel Kicilloff precisó que apenas implementado el aislamiento la violencia de género "nos preocupó, nos alertó, porque donde nos cuidamos del contagio del coronavirus, que es en nuestras casas, es donde se dan la mayoría de los casos de violencia familiar".
"En los femicidios, en más del 80 por ciento de los casos, quien comete ese asesinato es la pareja o la ex pareja y esto nos preocupó de entrada", afirmó Díaz.
Díaz explicó que la violencia contra la mujer "es preocupante ante algo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) definió como ‘epidemia social'".
"Somos un ministerio muy nuevito, pusimos todos los recursos orientados a todo lo que tiene que ver con la asistencia y la atención a las mujeres que sufren estas situaciones", apuntó.
Corte
Un balance hecho por ministros de la Corte Suprema estableció que los Tribunales lograron en general garantizar los servicios esenciales de justicia y buscarán en adelante adaptar el sistema a las medidas sanitarias contra la pandemia con recursos digitales y mecanismos a distancia para los procesos.
Con la declaración de feria extraordinaria hasta el 26 de abril, que se extenderá de acuerdo a lo que disponga el Ministerio de Salud para el aislamiento, la Justicia debe atender los episodios que demandan intervención judicial inmediata.
Ahora —dijeron los voceros—, el sistema de justicia tiene el desafío de transformar el viejo sistema en papel, que demanda la presencia física de los actores, a una enteramente digital y a distancia.
Cuando se desató la pandemia, la Justicia puso el esfuerzo inicial en garantizar que se siguieran recibiendo denuncias por violencia de género. En la misma línea, los funcionarios judiciales buscaron garantizar los amparos por temas de salud, los pedidos de prestaciones urgentes y el acceso a los medicamentos, como así también la situación de niños y adolescentes institucionalizados y personas que cumplen condenas. También se habilitaron los pagos electrónicos de sentencias y honorarios para evitar el colapso económico de los abogados y demandantes.