Desde el lunes, las obras particulares menores se habilitarán con hasta cinco trabajadores, profesionales o contratistas de distintos oficios desarrollando tareas, simultáneamente en el mismo lugar. Además, los trabajos no deben implicar el ingreso a viviendas con residentes, locales o establecimientos en funcionamiento.
A pesar de que la medida implica una reactivación de la actividad, desde la Cámara Argentina de la Construcción advirtieron que podría significar "un retroceso" por la imposibilidad de realizar controles en las pequeñas obras.
El presidente de la delegación local de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), Pablo Nazar, dijo que esperaban una autorización más amplia para volver a trabajar. "Es un paso muy importante para el sector para reiniciar la actividad, pero consideramos que se podría haber empezado por las obras respaldadas por empresas"; precisó en declaraciones a LT8.
"Tememos que signifique un retroceso y que no se puedan hacer los controles correspondientes. Las obras chicas son más una cuestión social", dijo para agregar que la propuesta de Camarco era encararlo "más para la empresas más grandes".
Nazar remarcó que hay más de cien obras de edificios de más de 1.500 m2 que emplean entre 35 y 40 trabajadores promedio, y que esta medida sólo avalaría que trabaje el 10 por ciento. "Una obra grande es difícil que arranque en estos términos. Para nosotros debería haber arrancado con otro encuadre", dijo.
El dirigente incluso señaló que podía ser "peligroso" ante la falta de controles necesarios. "Habrá que preguntarse quiénes son los responsables en cada obra", argumentó y dijo que se trata de "una decisión política". En ese sentido, admitió: "No podemos estar en contra porque implica reactivar la actividad, pero pensamos que debería haber tenido otro enfoque".
"Tememos por el tema de la movilidad, ya que según la norma las empresas se tienen que hacer cargo de la movilidad de los obreros. Entonces, nos preguntamos cómo se va a garantizar esto", dijo.
"Es un avance, pero no el que esperábamos. Si se manejaba controladamente, estábamos en condiciones de empezar con grandes obras. De esta manera va a ser masivo y difícil de controlar", cerró.
Todas las tareas deberán realizarse de lunes a viernes, de 12 a 18, y sábados, de 8 a 13. Además, los obreros deberán evitar desplazarse en colectivo y si no cuentan con un medio propio de transporte, la empresa deberá instrumentar algún traslado alternativo seguro.
Para comenzar los trabajos, deberán ingresar a www.rosario.gob.ar y completar la declaración jurada con los datos del profesional a cargo. Tras ello, se enviará por mail una constancia que deberá ser exhibida en el lugar.