El Indiecito rosarino campeón del mundo

Santiago Solari ayer entró en la historia grande del fútbol, pero a la vez se convirtió en el primer técnico rosarino en consagrarse campeón del mundo a nivel de equipos. El poderoso Real Madrid de España derrotó al Al Ain por 4-1, en la finalísima del Mundial de Clubes de la FIFA, en la ciudad de Abu Dhabi, en Emiratos Arabes y así el Indiecito trepó al escalón más alto como entrenador, con apenas 42 años. El actual DT de la entidad merengue se formó en la cantera de Renato Cesarini y luego hizo una gran carrera como jugador profesional a partir de la aparición rutilante en la primera de River. De esta manera, los rosarinos cuentan con un nuevo embajador deportivo de elite, ratificando que la ciudad además de ser la Cuna de la Bandera, es una de las usinas más importantes del universo fútbol en cuanto a la generación de personajes talentosos. Solari lo hizo.

"Es un logro difícil de igualar para cualquiera de los clubes. Estamos felices. Estos jugadores se lo merecen. Han llegado acá tras trabajar mucho y este tercer Mundial de Clubes consecutivo es el broche de las tres Champions seguidas. Esto es una gesta del Real Madrid. Lo logró con estos y otros jugadores, con otros entrenadores como (Zinedine) Zidane a quien felicitamos", dijo un eufórico Solari, tras la obtención del título mundial.

La historia del Indiecito se inicio hace varias décadas en Rosario. Se formó en una familia hiperfutbolera y polideportiva, y desde que comenzó a dar sus primeros pases lo hizo a través de su virtuosa pierna zurda. Arrancó su pasión por la pelota en Renato Cesarini, donde participó desde niño en el colegio deportivo. Luego tuvo un paso por el fútbol infantil de Newell's y regresó a Renato para terminar de pulir su formación, antes de convertirse en un exitoso futbolista profesional con rodaje internacional.

Como jugador Solari arrancó en River y luego estuvo en Atlético de Madrid, Real Madrid, Inter de Milán, San Lorenzo, Atlante (México) y Peñarol (Uruguay). Después se formó como director técnico y trabajó en las divisiones juveniles de Real Madrid, estuvo en el Castilla FC y este año, en octubre, asumió las riendas del primer equipo merengue. Y la primera final que jugó ayer la ganó, levantando el máximo trofeo del Mundial de Clubes. Un logro tremendo. Sólo para elegidos que se destacan por capacidad, inteligencia y perseverancia. Y, así, el Indiecito se convirtió en el primer DT rosarino en ganar la cita ecuménica a nivel de equipos. Una conquista que ya lo instaló en la historia gloriosa del fútbol rosarino, además de agregar su nombre a la exitosa Casa Blanca.

Rosario sigue dándole al mundo embajadores futbolísticos de primer nivel. Solari se sumó a la tropa exitosa con el logro supremo obtenido en Real Madrid. Claro que el otro grande español como Barcelona lo tiene a Lionel Messi, el mejor jugador del mundo de la actualidad. Dos ejemplos de que el fútbol rosarino en cuanto a la formación tiene más vigencia que nunca.