Pasan los años y los representantes en el fútbol de ascenso vienen en caída libre. Tanto Central Córdoba en la Primera C y Argentino en la Primera D, otra vez defraudaron con sus malas campañas en los respectivos campeonatos. El matador seguirá otro año más en la cuarta categoría y será la novena temporada en el 2023. El dato para tener en cuenta es que desde que asumió el mismo grupo dirigencial en 2014 pasaron 17 entrenadores, de lo cuales Ariel Cuffaro Russo estuvo en dos temporadas. Por su parte el salaíto viene de mal en peor, los resultados están a vista, serán 13 años en la quinta categoría y 16 técnicos pasaron por la entidad alba. En ese contexto, Matías Giroldi (Central Córdoba) y Alejo Villanueva (Argentino) fueron las figuras de sus equipos. No parece casualidad.
El fracaso deportivo de ambas instituciones en AFA fue rotundo. Todo va de la mano, no acertaron en general con las contrataciones pese a que hubo mayor disponibilidad de presupuesto y ninguno de los clubes pudo siquiera clasificar para disputar la próxima Copa Argentina 2023. Como cada inicio de temporada, la expectativa y la ilusión por saltar de categoría es el común denominador del matador y salaíto.
Por el lado de la institución de Tablada, la expectativa para el 2022 fue la mejor después de la gran temporada 2021 que realizó el DT Juan Rossi, donde llegó entre los 4 mejores equipos en la tabla general, logró clasificar al reducido y quedó en la puerta del ascenso con un presupuesto muy bajo.
En el arranque del 2022, la comisión directiva consiguió el dinero necesario para hacer frente a la temporada. Se trazaron diferentes objetivos, se apostó al mismo cuerpo técnico, pero el flojo andar del matador en las primeras fechas en el Apertura hizo que el DT diera un paso al costado por malos resultados. A partir de ese momento el panorama se complicó.
La dirigencia se movió rápidamente y contrató a Edgardo Malvestiti, ex jugador de los azules. El Chueco tampoco dio en la tecla y también dio un paso al costado. Rápidamente tomó el mando Walter Bello, técnico de la local para dirigir ante Real Pilar. Después de ese cotejo llegó José Vizcarra, que disputó 6 partidos: ganó 2, empató 2 y perdió los 2 restantes.
Por barrio Sarmiento la ilusión por saltar de categoría fue muy grande y en esa sintonía la dirigencia del albo apostó a gerenciar el fútbol de la Primera D con la llegada de Alejandro Schneider y su equipo de trabajo. El panorama fue el mejor, se presentó un plantel totalmente nuevo y un cuerpo técnico encabezado por Juan Pablo Suárez.
Todo estaba dado para que Argentino dieran un salto de calidad, en un torneo de apenas 11 equipos. La participación del albo en el torneo Apertura fue regular y terminó a 3 unidades de Centro Español, equipo que llegó a la final.
Todo lo contrario fue el desempeño en el Clausura, el equipo dirigido por Suárez perdió 4 partidos de local y solo sumó 11 unidades. Después llegó el torneo Complementario por el 2º lugar a la Copa Argentina 2023 y Sportivo Barracas lo dejó en el camino. En un año para el olvido en la 5ª categoría llegó la obtención de la Copa Santa Fe como premio consuelo. Poco para ambos, el ascenso siguió lejos. Como hace más de una década.
Matías Giroldi, arquero de Central Córdoba
" Sacando el partido ante Boca, la temporada fue mala. Tuvimos muchos altibajos y nunca pudimos dar el paso para poder pelear por el ascenso”
Alejo Villanueva, arquero de Argentino
"La temporada es buena a pesar de los resultados. A los procesos hay que bancarlos. Estoy muy contento por defender estos colores”