Mónica Gonzaga confesó que la “partió al medio” el escándalo que se armó por la fiesta clandestina que organizó su hijo en plena pandemia en Uruguay. La actriz, radicada en el país vecino, aseguró que el gobierno oriental le impuso una multa de 23.000 dólares, una cifra que los obligará a vender un departamento para poder afrontarla.
"Me partió al medio esta historia de la fiesta clandestina, sobre todo porque odio las injusticias. Nunca me habían dicho cosas feas en las redes y ahora sí, y a veces hablan sin saber”, aseguró Gonzaga, y agregó: “Fue una fiesta de cumpleaños, con 15 chicos haciéndose hamburguesas. Llegó una multa y fui a pagarla, pero no me dejaron”.
A mediados de marzo, Gonzaga quedó envuelta en la polémica cuando el gobierno uruguayo le revocó la residencia temporal a su hijo por organizar una fiesta clandestina para más de 500 personas. Las autoridades no solo expulsaron del país a Adriano Sessa, de 22 años, también le impusieron una multa de 23.000 dólares.
“Esto pasó porque en esos días crecieron los contagios y buscaron ejemplificar conmigo”, comentó la actriz al programa de América “Intrusos”, antes de viajar a Estados Unidos para grabar una nueva serie. Y visiblemente conmovida siguió: ”A Adriano lo sacaron del país, cosa que me hizo mucho mal. Le sacaron la nacionalidad, es mucho”.
“Vi todo muy raro, me sentí muy insegura porque no sabés quién está del otro lado. Me sentí usada, con miedo. La persona del Ministerio del Interior me decía que me tenía que ir ya”, aclaró la intérprete y fue más allá: “ “No son 23.000 dólares sino más, alrededor de 33.000 sumando honorarios de abogados. Se está tratando de negociar. Si hay que pagar eso, Adriano tiene que vender su departamentito y pagarlo”.
Por su parte, el hijo de Gonzaga dijo: “Estoy tratando de dejar esto atrás. Pedí disculpas, acepté las consecuencias y le doy para adelante. La multa me liquida, yo no podría pagarla. Tendría que acudir a alguien de mi familia y eso para mí sería retroceder. Ya me tildaron varias veces de vago, fiestero, pero no es así. Estudio ingeniería”.
Finalmente, admitió que espera poder volver a vivir a Uruguay. “Es lo que más quiero en esta vida. Voy a ser viejo y voy a seguir yendo ahí”, concluyó.