Con el claro objetivo de frenar la curva de contagios de coronavirus, el gobierno provincial dispuso restringir la circulación de autos y motos a partir de las cero hora de este jueves. Sólo podrán movilizarse quienes acrediten que van a trabajar, sean esenciales o no, o quienes puedan justificar que se desplazan por una situación de fuerza mayor, como cuidado de personas o asistencia médica. El transporte público seguirá funcionando. Los comercios deberán bajar las persianas a las 17, al tiempo que la gastronomía funcionará hasta las 19. Los gimnasios y los clubes también deberán cerrar sus puertas y se prohibirán las actividades náuticas y la pesca deportiva y recreativa. La medida regirá hasta el 30 de este mes.
Por otro lado, se suspende la práctica de deportes grupales de contacto, tanto al aire libre como en espacios cerrados y las competencias deportivas provinciales, zonales o locales de carácter profesional o amateur que no estén habilitadas expresamente por las autoridades nacionales.
La restricción también alcanza a las actividades sociales y familiares, ya que desde las cero hora de este jueves se suspenden los encuentros en lugares cerrados o al aire libre.
También se dispuso una suspensión de la actividad comercial en paseos, shoppings y establecimientos afines.
Los locales gastronómicos solo podrán funcionar entre las 6 y las 19, al tiempo que los comercios no esenciales podrán trabajar hasta las 19.
No se podrá entrenar en forma grupal en los parques y plazas de la ciudad, y también estará prohibido realizar pic-nics y encuentros. Así, la actividad física al aire libre solo deberá limitarse a caminatas o trotes en forma individual.
En relación a las actividades náuticas, también quedarán suspendidas, al igual que la pesca deportiva y recreativa en la modalidad costa y embarcados. También deberán cerrar las guarderías náuticas.
Consenso
Las nuevas restricciones fueron comunicadas anoche por el gobierno provincial luego de que el propio gobernador, Omar Perotti, mantuviera reuniones durante el lunes y martes con los intendentes de las principales ciudades santafesinas.
El diagnóstico de todos fue coincidente: es necesario restringir al máximo la circulación de personas para frenar los contagios de Covid, que están poniendo al sistema de salud, tanto público como privado, contra las cuerdas.
Las voces de alerta se escucharon desde el comienzo de esta semana. Es más, los principales funcionarios del área sanitaria de la provincia habían alertado que se tornó muy complejo conseguir una cama crítica en Rosario y las principales ciudades santafesinas; al tiempo que los médicos advirtieron la posibilidad de colapso del sistema y el grado de cansancio y estrés que está padeciendo el personal.
El anuncio de las restricciones llegó en el epílogo de un día en el que en Rosario se registraron 948 casos de Covid, el número más alto de los últimos siete meses, al tiempo que en la provincia se registró el récord desde el comienzo de la pandemia: 3.272.
Las medidas que entrarán en vigencia a las cero hora de este jueves se extenderán hasta el domingo 30 de este mes inclusive y su resultado será monitoreado permanentemente por las autoridades del Ministerio de Salud.
El objetivo es lograr una disminución de los contagios que tenga un efecto positivo en el sistema sanitario, que viene trabajando bajo un profundo y severo estrés desde hace varios días.
El último reporte epidemiológico detalló que en Rosario estaban ocupadas el 99% de las camas críticas en los efectores públicos y el 94% en los privados.
Según destacaron los médicos y expertos que asesoran al gobernador, esa es una de las máximas preocupaciones por estas horas, ya que se está dificultando al extremo la posibilidad de conseguir una cama crítica para alguien que así lo necesite para poder afrontar un cuadro grave de coronavirus. Es más, la enfermedad está atacando en estos días a pacientes que tienen un promedio de edad de 50 años y demandan más tiempo de internación.