La revitalización del área central aprobada por el Concejo Municipal tuvo una de cal y una de arena. Mientras que el oficialismo dio marcha atrás con la posibilidad de demoler sobre la peatonal Córdoba lo que fuera el ex cine Palace, no logró frenarse la posibilidad de que se demuela la esquina noreste de San Martín y San Juan, donde también supo funcionar una sala de proyección. Para la concejala justicialista y presidenta de la Comisión de Planeamiento, Fernanda Gigliani, no solo se trata de un "pésimo" antecedente, sino que además advirtió que tras este cambio en las reglas del juego "van a llover pedidos de descatalogación al Concejo porque cuando se dan pasos como este forzando los argumentos después es muy difícil decir que no a quienes hacen esos pedidos".
Las advertencias hechas por la presidenta de la comisión y a la que se sumaron los concejales del Frente de Todos señalaban no solo "la pérdida de patrimonio arquitectónico" que podrían significar las descatalogaciones y, por ende, la posibilidad de demoler esos inmuebles, sino además "la arbitrariedad" a la hora de decir qué debe preservarse y qué no.
La ordenanza de patrimonio, detalló Gigliani, justamente es la que "define el mecanismo específico para la descatalogación de inmueble y es clara al indicar que la única causal para dar ese ese paso es declarar la ruina del inmueble".
Un argumento forzado
Para la concejala, en el caso de la esquina donde funcionó el cine Belgrano y actualmente está instalado bazar Arribo "lo que se hizo fue forzar el argumento", ya que señaló que "claramente el edificio no está en ruinas y plantea la necesidad de diálogo entre el inmueble y el espacio público, cuando qué más que la fachada es justamente la que debe articularse con el espacio público".
"Lo que presiento es que además de ser un pésimo antecedente, con edificios en la ciudad que están en mucho peores condiciones que la esquina de San Martín y San Juan, van a comenzar a llover a la comisión pedidos de descatalogación de edificios -continuó-. Y cuando se fuerzan argumentos de este modo, es difícil después decir que no a esos pedidos".
Así como lo hizo la concejala Norma López, "eso no hace más que alentar la especulación de quienes ya sucede compran inmuebles de valor patrimonial a precios irrisorios y atenta contra los particulares que son dueños de esos inmuebles y tienen una mínima intención de mantenerlos".
De hecho, Gigliani señaló que en los últimos años "son muy muy pocos los convenios de preservación que logran hacerse entre el municipio y los particulares para sostener esos edificios".
El vaso medio lleno
Así como no ahorró críticas, la titular de Planeamiento celebró la decisión de frenar la descatalogación del edificio que fuera del ex cine Palace, sobre la peatonal Córdoba al 1300.
"Es bueno que hayan desistido del planteo original y mantienen la protección directa", dijo Gigliani, que recordó además durante la sesión del miércoles que había sido la gestión del ex intendente Miguel Lifschitz la que había financiado la recuperación de ese frente céntrico de la ciudad y que incluso los arquitectos que llevaron adelante esa recuperación habían sido premiados por ese trabajo.
Otro de los cambios en materia de preservación que consideró "positivo" se dio sobre los edificios catalogados como preservación del entorno.
"Son los casos de los inmuebles 3b, que pueden ser demolidos y sustituidos por otra construcción que no puede superar la altura del edificio lindero que es el de valor patrimonial -explicó-. Ahora lo que se estableció es la posibilidad darle mayor altura, pero para hacerlo deben hacer una transición articulada y armoniosa con el lindero".