Pasado el frenesí electoral, los taxistas rosarinos volverán a la carga con su reclamo de mayor seguridad y lo direccionarán al ministerio que conduce Maximiliano Pullaro. A su entender, las as intromisiones en el ámbito local, tanto del Concejo Municipal como desde la Intendencia, "lo único que logran es embarrar la cancha".
Los representantes de las distintas agrupaciones que nuclean a los taxistas destacaron que se necesita más presencia policial en las calles, que sería un aporte positivo el instalar más controles sorpresivos a unidades con pasajeros, remarcaron la utilización de motos para cometer los delitos que los tienen como blanco, muchas veces con consecuencias trágicas, y solicitaron la participación de autoridades del Poder Judicial en las reuniones sobre seguridad.
"El Concejo no se tiene que meter con estas cuestiones de seguridad. Es más, pedimos por favor que no se metan, porque cada vez que se meten es para embarrar la cancha", resaltó Mario Cesca, referente de la Asociación de Taxistas Independientes, quien apuntó que "nosotros, los problemas de seguridad los manejamos directamente con el Ministerio de Seguridad y con la policía. Y veníamos teniendo buenos resultados, lamentablemente todo se ensució cuando se acercaron las elecciones. Eso nos llamó poderosamente la atención".
Y explicó: "De tener uno o dos robos por semana, esos hechos se multiplicaron, se rompió esa estadística y hubo una noche con más de 8 robos en distintos puntos de la ciudad. Y la semana anterior a las elecciones falleció el taxista Mario Esusy. Yo tengo el cuero un poco curtido y veo que después de una muerte, de un hecho resonante de violencia, sigue una seguidilla de episodios similares", aseguró.
Cesca reconoció una profunda preocupación. "Hay una realidad, y es que el Ministerio de Seguridad viene dando una pelea fuerte con todas las bandas de narcos. Es una pelea golpe a golpe, de un lado y del otro. Y cuando el ministerio le mete la mano en el bolsillo a los narcos, estos grupos balean a un juez, al Concejo, a la sede de Fiscalía, un bar o entradas de edificios. Y también está la conexión con los remises truchos, que cada vez que aumentamos nosotros los reclamos, aparecen más hechos de este tipo", apuntó el dirigente taxista.
"Un loco suelto con una moto, ninguna policía del mundo lo puede solucionar. Pero me llama mucho la atención cuando viene un tipo en moto, balea a un taxista y no hay un robo. Eso es muy llamativo, muy extraño", subrayó Cesca.
El referente gremial admitió que "existe una gran preocupación, aunque es difícil determinar si responde a una cuestión electoral. Pero no queremos la intervención del Concejo, ni de la Intendencia, porque no manejan la seguridad. Esto está más relacionado a la provincia y a la Nación y sus disputas con las bandas narco".
"El gran miedo de los taxistas es quedar en el medio de esa pelea. No queremos ser usados, porque muchas veces le pegan al chancho para que chifle el dueño", enfatizó Cesca.
Gran preocupación
Por su parte, José Tornambé, de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis, expresó que "la necesidad es seguir mejorando los operativos, habría que aumentar los controles sorpresivos. Y lo que pedimos desde nuestra Cámara es la integración del Poder Judicial a estas reuniones, porque hay delincuentes que salen muy rápido, y lo primero que hacen es asaltar un taxi".
Y agregó: "Otra cuestión que pedimos son los controles a las motos, que son el problema más grande que tenemos ahora, ya que está cambiando la modalidad de robo. Antes lo hacían desde adentro, mientras viajaban, y ahora desde que pusimos los GPS y las cámaras de seguridad, lo hacen con motos, desde afuera de la unidad, para escapar más rápido".
En ese sentido, denunció que "lo que vemos nosotros es que el 80 por ciento de las motos que están dando vueltas en la ciudad son robadas, o sin patentes".
Sobre el extraño clima que se vive en este etapa de elecciones, Tornambé comentó que "algunos dicen que responden a problemas internos en la policía, pero no lo puedo asegurar. Tampoco sé si desde enfrentamientos de la política, que es muy sucia, pueden surgir este tipo de actos. Pero un tipo no puede andar con un revólver en la mano, tirando tiros, baleando casas, matando tacheros y cuanta cosa se le cruce, y que en un solo fin de semana tengamos 15 robos. No se puede vivir en una ciudad así", sentenció el referente de los titulares de taxis rosarinos.