Sin embargo, otros dos ´se sumarían en breve y hay consultas de personas que van a la Municipalidad interesadas en el negocio. Fuentes del sector estimaron que se necesitan unos 700.000 pesos aproximadamente para montar cada emprendimiento.
La Cámara de Food Trucks Rosario, a través de su presidente, Arturo Milano, explicó que se están corrigiendo distintos aspectos del negocio para que el rubro tome impulso. Detalló que, en las últimas semanas cerraron filas para participar de distintos acontecimientos de la ciudad y la región en las próximas semanas. Por ejemplo, serán parte del entorno del Cirque de Soleil en el ex predio de La Rural, de una feria de la moda en el parque España, de los festejos del Día del Abogado en la plaza del Foro, de Rosario Vuela, de otra movida que se realizará en el shopping de Fisherton en las próximas semanas y en una actividad más de los comerciantes de calle Cafferata, buscando captar parte del público atraído por el Mercado del Patio.
De todos modos, Milano —que está al frente del camión de La Vendetta— explicó que, a casi un año de andar en la calle, están corrigiendo algunos aspectos del negocio. Según el representante del sector, aun en este contexto económico los food trucks tienen espacio para crecer. "Creo que el rubro se puede ir consolidando para conformar una comunidad de negocios rentable", señaló, y consideró que la experiencia muestra que se trata de un área para emprendedores y "no está orientada para grandes marcas o estructuras".
A fines de 2016, la intendenta rubricó el decreto reglamentario para esta nueva modalidad gastronómica en la calle. Pero fue recién a mediados de septiembre de 2017, y después de un extenso proceso licitatorio, cuando los food trucks salieron a cocinar al público. Rosario fue la primera ciudad del país en regular esta innovadora modalidad de negocio gastronómico.
El circuito habilitado está conformado por cuatro parques de Rosario, pero los dueños de estos emprendimientos coinciden que de momento sólo el de las Colectividades "funciona y es rentable". En menor medida, el parque Sunchales, aunque no arrancan los espacios Urquiza y Scalabrini Ortiz.
Actualmente salen a la calle Mejunje, Hell's Truck, Tapenade, La Vendetta y Helados Mister Soft. Y hay dos, Carmencita y Rosario Grill, que estarán saliendo en breve a la calle. Hubo otros que a poco de arrancar devolvieron las licencias o dejaron de funcionar. Y hay algunos más que están habilitados para funcionar de forma esporádica.
Exigencias
Para tener un food truck, cada adjudicatorio de licencia debe abonar un canon mensual que ronda los 4.000 pesos, pero varios de los emprendedores tomaron créditos por lo que, sumada a otros costos de funcionamiento, la situación para varios es ajustada. Por eso algunos de ellos decidieron bajar la persiana.
Según las fuentes consultadas, el municipio no tiene previsto en el corto plazo abrir el grifo a nuevos jugadores. Existen conversaciones y hasta ideas de introducir algunas modificaciones a las reglas vigentes para que sean cumplibles. Pero aún no se avanzó en ningún papel sobre cambios en la reglamentación actual. Los propietarios de los food trucks apuntan a calentar motores con la llegada de la primavera y de la mano de la convocatoria a eventos, como en estos días.