Que los alimentos es uno de los rubros que más aumentó en los últimos meses no es novedad. Cada visita al supermercado, almacén, verdulería o panadería implica encontrarse con nuevos precios y no hay billetera que aguante. Esta vez es el turno de los huevos, que desde que arrancó el año no paran de aumentar. Un maple en Rosario ya cuesta más de 1.400 pesos. Desde mediados de septiembre del año pasado a hoy, el incremento fue del 70%.
Pese a que muchos especulan con que la suba abrupta está vinculada a la gripe aviar, no es el motivo principal. Desde la Cámara Avícola Santafesina confirmaron a La Capital que las aves que hubo que sacrificar por este motivo en la provincia son muy pocas. El cambio en el precio tiene que ver con el aumento significativo de los costos de los cereales, principal alimento de las gallinas, la sequía y también la ola de color.
Según detallaron, tras la implementación del llamado "dólar soja" subieron los costos de los alimentos de pollos y gallinas. "Los precios quedaron muy arriba. La tonelada de soja pasó de costar 60 mil dólares a más de 90 mil", explicó Alejandro Coianiz. La sequía también impactó de lleno en la actividad.
Es más, el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, anunció en enero el Programa de Fortalecimiento Productivo Argentino que compensa a los productores porcinos y avícolas que fueron afectados por la suba de los insumos ante la segunda versión del dólar soja, para revertir la situación.
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De igual forma, el representante de la Cámara precisó que el mercado avícola depende de la oferta y la demanda más que de los costos. Además del alto precio del alimento, el calor está haciendo estragos. Las gallinas ponen menos huevos ante las altas temperaturas. "Hay más mortandad en los animales y disminuye la postura de las gallinas. Así como afecta a los humanos, también afecta a los animales y bajan el rendimiento", agregó.
En la actualidad hay tanta demanda de huevos y pollos, alimentos imprescindibles en el día a día de muchos rosarinos, que no alcanza la oferta que hay para lograr satisfacerla. Por eso, el costo sube todas las semanas e impacta directamente en el bolsillo de los consumidores.
Por otra parte, Daniel, empleado de Avícola Polca, indicó que "la gente se queja pero lo lleva igual". Lo que hasta hace poco era una proteína sana y relativamente barata, hoy ya no lo es. El precio del maple, que ahora está a 1.400 pesos, está subiendo prácticamente todas las semanas.
Este martes el Indec dio a conocer la inflación de febrero, que trepó al 6,6% y acumuló 102,5% en los últimos doce meses. Del mismo modo que había ocurrido en enero, la influencia del valor de los alimentos, con una alza del 9,8%, muy por encima del nivel general, explica parte del resultado de febrero. El porcentaje está vinculado con la suba de carnes y derivados y de leche, productos lácteos y también los huevos.
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Primeros impactos
Uno de los rubros que se ve más afectado por el aumento del precio de los huevos es el panadero. Deben comprar este alimento perecedero dos veces por semana y no trasladar las subas a los clientes cada vez es más complicado.
Jorge Vitantonio, de la Asociación de Industriales Panaderos y Afines de Rosario, consideró que hay aumentos "que son inmorales". En diálogo con este diario, precisó que además de los huevos, en lo que va del año el azúcar y sus derivados, como la mermelada y el dulce de leche, incrementaron sus precios hasta un 35%.
Ante este escenario, las facturas y la confitería podrían irse por las nubes. "Estamos intentando no trasladar todos estos aumentos. Nos sirve que es una época de calor y hay menos consumo, pero es inevitable que las facturas suban su precio. La docena no va a estar menos de 1.200 pesos", indicó Vitantonio. Aunque aclaró que este precio será para "las facturas bien hechas".
El pan, por ahora, se mantiene estable. Desde que arrancó el 2023 no ha aumentado la harina y los únicos incrementos que hubo fueron para cumplir con los acuerdos paritarios. "No la vamos a correr a la gente con los aumentos, si el objetivo es que sigan viniendo a las panaderías", concluyó el referente. Si el panorama sigue así, los panaderos no serán los únicos que deberán ajustar los precios.