La actividad de la construcción empezó a dar muestras concretas de recuperación en la pospandemia. Un informe elaborado por el municipio rosarino indica que los permisos de edificación en mayo tuvieron un importante aumento con respecto al mes anterior, en un 41,3 por ciento de las superficies totales autorizadas.
En cuanto a la cantidad de permisos de construcción otorgados (modificaciones internas, ampliaciones), este número también tuvo un incremento con respecto al mes anterior (31,5%) y, también si se compara con mayo del 2021. Un dato que subrayó el secretario de la Producción municipal, Sebastián Chale, fue la suba de los metros cuadrados a construir para suelo de uso no residencial. Es decir, para logística uso industrial e industrial.
Según el portal de datos abierto del propio municipio, los valores promedio mensuales de los últimos diez años de la prepandemia (2010-2019) y haciendo una comparación, se observa que en los primeros 5 meses del año 2022 la cantidad de permisos de construcción otorgados conserva valores por debajo de su media histórica.
Sin embargo cuando se desglosa el cuadro de los últimos meses, se nota un marcado repunte. Si en los primeros cuatro meses del año los permisos de edificación otorgados promediaban los 100 mensuales, mayo cerró con 146. Y en el caso del uso no residencial, abril tuvo autorizados unos 8 mil metros cuadrados mientras que mayo saltó a 20 mil metros cuadrados.
Consultados funcionarios de la Secretaría de Planeamiento del municipio, se indicó que comparando la sumatoria de los metros cuadrados autorizados a construir de uso residencial de los 5 primeros meses de los años 2020, 2021 y 2022 se observa que año a año hubo un aumento muy marcado del 2020 al 2021 del 95 por ciento (debido a las restricciones de circulación por la situación de pandemia) y una suba del 4 por ciento entre el año 2021-2022.
Y realizando la misma comparación referida a los metros cuadrados para uso no residencial se detecta una situación similar a la observada para uso residencial. Comparando la sumatoria de los cinco primeros meses de los años 2020, 2021 y 2022 se advierte un incremento del casi 80 por ciento del 2020-2021 y del 30 por ciento entre el año 2021-2022.
Es por ello que se afirma que si bien en el promedio histórico “se resalta que en el mes de marzo y mayo la baja no ha sido tan considerable, sí se dio en los tres meses restantes”.
Repunte
“Es un crecimiento importante en cuanto a los metros cuadrados en relación al 2020 y 2021, ya que se aprecia un repunte importante y se está observando un crecimiento de unos 20 mil metros cuadrados no residenciales donde probablemente su uso sea para superficie logística, industrial. Esto demuestra que muchos proyectos ya solicitados de permisos y obras que se fueron gestando en el último tiempo, para estos emprendimientos para volcarlo a servicios y actividades del rubro”, destacó el funcionario.
La mirada de los privados
Desde la Asociación de Empresarios de la Vivienda (AEV) su titular, Gonzalo Espíndola, confirmó que el sector privado percibe la cantidad de los permisos con una suba a ritmo constante en gran medida por “la agilización de trámites a través de un plan innovador con tecnología, digitalización de los permisos de edificación que achicaron plazos y hace las gestiones más sencillas y rápidas en la obtención del visto bueno”.
Desde la entidad se destacó el retiro de “cepos” que impedían el crecimiento y desarrollo en otros sectores no convencionales, para citar los barrios Fisherton y Pichincha como ejemplos.
“También influye el efecto de la pospandemia y su impacto en el mercado y volvió el cliente inversor que estaba ausente con un mercado locativo que reencauzó sus precios a valores históricos y más atractivo como refugio ante la inflación en el país y a nivel mundial en dólares”, indicó Espíndola.
En cuanto a las zonificaciones, además de los sitios convencionales como la primera línea sobre el río, el centro y macrocentro, hay un traslado de los proyectos de inversión a barrios con avenidas, arterias y bulevares. “Esto atrae al comprador que vive en ese barrio y desea permanecer allí, pero en otro formato de vivienda colectiva, como por ejemplo el condominio, algo más eficiente y económico”, destacó el directivo.
Intacta
El vicepresidente de la AEV, Angel Seggiaro, consideró que el crecimiento en los permisos de abril a mayo “obedece a la potencia intacta que tiene todo el aparto productivo de la obra privada en Rosario”, y luego se refirió al uso no residencial, que también presentó un salto cuantitativo de pedidos.
“En materia de logística, galpones y empresas se quiere ampliar en una reactivación incipiente, en una oportunidad de inversión en la expansión a bajo costo constructivo lo que se traduce en esta cantidad de nuevos metros cuadrados. Es un hecho que hay sectores que están creciendo para uso no residencial”, indicó el constructor.