Norberto Loizeau es dueño de un bar temático de cine que durante la pandemia por el coronavirus, como tantos otros comerciantes, debió cerrar sus puertas. Sin embargo, respetó las reglas a rajatabla y pagó los sueldos de todos sus empleados sin imaginar lo que sucedería después: la mayoría había conseguido otros trabajos. Increíble, pero real.
“Después de 12 meses cerrados por la cuarentena, el gobierno decidió habilitar los cines. Así que reabrimos «El Capitán». Once meses pagando salarios de 20 personas. Ahora los convoco a trabajar y 14 de las 20 estaban laburando en otro lado. Pelotudo es poco lo que me siento!!”, escribió indignado Tito Loizeau en Twitter. Obviamente, el mensaje se viralizó en las redes y tuvo miles de comentarios y respuestas cargadas de empatía.
El enojado Norberto, en diálogo con Clarín, explicó que el descargo en las redes fue una especie de “catarsis” y detalló que se enteró lo que sucedía cuando le escribió por privado a cada uno de sus empleados para que vuelvan a trabajar una vez que el gobierno avanzó con el plan de reapertura de los cines.
La sorpresa mayor fue cuando se enteró que de los 20, 14 ya habían conseguido otro trabajo, algunos desde hacía varios meses, pero nunca le habían dicho. “Siguieron cobrando la ayuda del Estado” mientras duró, “y el sueldo que les pagaba” Loizeau a pesar de que tenían otros empleadores.
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“Fue una decepción. Fue pensar «yo te banqué, no te dejé en la calle tirado y así y todo me cagaste». Gasté dos millones y medio en sueldos durante todo el año, manteníamos un diálogo, una relación y esa fue su forma de respuesta”, cuenta ahora Tito con justa indignación.
Además, Tito recordó que “por un decreto”, el gobierno impidió despedir o suspender al personal por la pandemia por el coronavirus, por lo que él decidió anotarse en el ATP. “Eso nos cubrió el 50% de los salarios, la otra mitad la pagaba yo de mi bolsillo sin tener ningún ingreso”, precisó.
Sobre el futuro de la situación, el hombre manifestó que no va a iniciar acciones legales contra sus ex empleados. En su lugar espera que manden todos el telegrama de renuncia y que la historia termine allí.
El bar “El Capitán” está ubicado en Norcenter, el shopping de zona norte, en un local lindante a los cines Showcase Norte y es un restorán temático de cine inspirado en Hollywood de los años 30.
“Ahora tengo sólo seis empleados, aunque yo sé que si pongo un aviso tengo una fila de gente que pide laburar. Pero queremos esperar a ver cómo funcionan los protocolos del cine, si eso atrae al público y ahí evaluaremos”, concluyó.