El cadáver de una joven en avanzado estado de descomposición fue encontrado ayer tarde en la localidad entrerriana de Santa Elena y los investigadores creen que se trataría de Gisela López, la chica que desapareció el 22 de abril cuando regresaba a su casa de la escuela nocturna a la que asistía.
El cuerpo, que anoche era sometido a una autopsia para determinar la identidad y las causas de la muerte, fue encontrado accidentalmente por un hombre que recorría ayer a caballo la zona de Santa Elena conocida como El Bajo, a unos 500 metros de la vivienda donde residía la joven.
Fuentes vinculadas con la investigación dijeron a Télam que la muerte de la joven dataría de varios días, debido al estado de descomposición que presenta.
El sitio donde apareció el cadáver ya había sido recorrido por los perros rastreadores, pero se sospecha que no fue detectado por las copiosas lluvias caídas en la zona últimamente.
La ropa que presenta el cuerpo es coincidente con la que vestía Gisela López, de 18 años, al momento de su desaparición, según las fuentes, lo que hace creer a los investigadores que se trata efectivamente de ella.
Seguida por un hombre. Una vecina había dicho a la policía que el día de la desaparición de Gisela vio caminar a la joven hacia su casa, seguida unos metros más atrás por un hombre con campera.
El sitio donde apareció el cuerpo es una zona de monte y hay algunas casas.
El padre de la chica desaparecida, Jorge López, reveló que Gisela salió el viernes 22 de abril a las 19 de su casa del barrio 120 viviendas, ubicado cerca del arco del ingreso a la ciudad de Santa Elena, para dirigirse hacia la Escuela Secundaria de Jóvenes y Adultos (Esja).
Explicó que Gisela y una hermana eran buscadas habitualmente en una moto por un hermano a la salida del establecimiento educacional, pero ese día la chica decidió volver sola hasta su casa.
Gisella fue vista por última vez por uno de sus hermanos el viernes 22 de abril, a unas diez cuadras de su casa, cuando volvía de la escuela en la que había pedido permiso para retirarse porque lloviznaba.
Más de 200 policías, helicópteros, drones y perros adiestrados participaron de la búsqueda de Gisela en Santa Elena,
En la causa por la desaparición de Gisela, el fiscal de La Paz, Santiago Alfieri, ordenó hace unos días la prisión preventiva de un hombre detenido por su presunta vinculación en el hecho.
El hombre, que voceros policiales identificaron como Gustavo Centurión, de 36 años, fue detenido luego de que uno de los perros rastreadores marcó el domicilio donde vive, en proximidades del barrio Ejército de Paraná, a más de 150 kilómetros del lugar de residencia de la joven.
Fuentes vinculadas con la investigación dijeron a Télam que el sospechoso negó conocer a la chica o haber tenido algún contacto con ella, a pesar de que uno de los perros llegó hasta la vivienda de Centurión siguiendo el rastro de la muchacha.
El fiscal Alfieri le imputó el delito de "privación ilegítima de la libertad" y le pidió la prisión preventiva a la jueza de Garantías de La Paz, Silvina Edith Elvira Cufré.