El empleado de la Ceamse que descubrió el cadáver de Ángeles Rawson en la planta de la localidad bonaerense de José León Suárez, aseguró hoy en el juicio que él paró la máquina porque pensó que se trataba de un cerdo.
El empleado de la Ceamse que descubrió el cadáver de Ángeles Rawson en la planta de la localidad bonaerense de José León Suárez, aseguró hoy en el juicio que él paró la máquina porque pensó que se trataba de un cerdo.
El testigo Leonardo Sebastián Gelso, declaró luego de ser conducido con la policía y por la fuerza pública hasta tribunales por orden del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9, ya que hacía tres semanas que había sido convocado y no se presentaba a declarar.
Gelso dijo que está desocupado pero recordó que aquel 11 de junio de 2013 trabajaba como “reciclador” en la cinta transportadora de aquella planta de tratamiento de residuos de la Ceamse cuando “apareció el cuerpo de Ángeles”.
El testigo reconoció ante los jueces que él paró la máquina porque vio “un bulto de color rosadito”.
“Pensamos que era un animal. Parecía un cerdo”, señaló Gelso quien precisó que el hallazgo se produjo alrededor de las 11.20 cuando “faltaba poco para el almuerzo”.
Al describir el estado del cadáver, el testigo dijo que “se le veía un corte en una pantorrilla, tenía dislocada la parte de arriba (se señaló el tórax), le faltaba un pezón y tenía una bolsa de supermercado y color verde en la cabeza, pegada a la cara con sangre”.
También recordó que “tenía ataduras” y por último explicó que si él no veía el cuerpo en la zona de separación manual para reciclaje, hubiera ido a parar al relleno sanitario.