Cabo Cañaveral- Un astronauta estadounidense y un cosmonauta ruso completaron
hoy una caminata espacial de cinco horas y media afuera de la Estación Espacial Internacional
para instalar un aparato que observa las condiciones en torno al puesto orbital.
Los ingenieros creen que cargas eléctricas provocaron las fallas que llevaron a
las cápsulas espaciales rusas a regresar a la Tierra fuera de curso y crearon problemas al
aterrizar durante dos retornos al planeta en octubre del 2007 y abril del 2008.
Los controladores de vuelo organizaron una caminata espacial en julio para
desconectar equipamiento sospechoso en la última cápsula Soyuz, lo que evitó los problemas durante
su aterrizaje en octubre.
En búsqueda de más datos, los controladores de vuelo rusos despacharon en la
noche del lunes al comandante de la estación, Michael Fincke, y al ingeniero de vuelo Yury
Lonchakov para que instalaran una sonda para observar los campos magnéticos cerca de donde se
acoplan las cápsulas Soyuz.
Fincke es un veterano que ha participado en cuatro caminatas espaciales previas,
en tanto, Lonchakov participó en su primera misión de este tipo.
“La estación espacial es este enorme y viejo pedazo de metal que vuela a
través de un campo magnético”, dijo el vicedirector de programa Kirk Shireman a periodistas
la semana pasada.
“Hay una nube de electrones volando en torno a la estación en todo
momento. Y luego la estación en sí genera electricidad”, agregó.
Fincke y Lonchakov completaron rápidamente la tarea principal de su caminata
espacial, luego instalaron dos experimentos científicos en el exterior del módulo orbital.
Pero cuando llegó la hora de probar el nuevo equipamiento, los controladores no
lograron recibir datos en la Tierra.
Mientras se agotaba el tiempo, los directores de vuelo dijeron a los hombres que
retiraran uno de los experimentos y volvieran a la esclusa de aire.
“Hicimos todo lo que pudimos”, dijo Finke, hablando en ruso, a
través de un traductor.
La estación, un proyecto de 16 países con un valor de 100.000 millones de
dólares, está a punto de ser terminada después de más de una década de construcción. El próximo
año, la NASA y sus socios piensan ampliar la tripulación a bordo de tres a seis astronautas.
La próxima misión de la Nasa a la estación está programada para febrero.
(Reuters)