Julio Alsogaray, hijo del ex general del mismo nombre, declaró espontáneamente en la Justicia Federal tucumana para ofrecer detalles sobre la muerte de su hermano, Juan Carlos Alsogaray, ex militante montonero, en febrero de 1976.
Julio Alsogaray, hijo del ex general del mismo nombre, declaró espontáneamente en la Justicia Federal tucumana para ofrecer detalles sobre la muerte de su hermano, Juan Carlos Alsogaray, ex militante montonero, en febrero de 1976.
Alsogaray (h) presentó ante el juez federal Daniel Bejas una declaración testimonial por escrito —que luego amplió— en la que brindó detalles del denominado "Operativo Independencia", desarrollado por el Ejército en Tucumán.
Según informaron en la Secretaría de Derechos Humanos del Juzgado Federal, la información que aportó es para que sea utilizada en aquellas causas en las que pueda ser útil, incluso en la relacionada con la muerte de su hermano, ocurrida en un supuesto enfrentamiento.
Alsogaray (h) recordó que en febrero de 1976 su padre le pidió información a Antonio Domingo Bussi, entonces al frente del "Operativo Independencia", sobre la suerte corrida por su hijo, Juan Carlos, en Burruyacu, un departamento ubicado 35 kilómetros al este de la capital tucumana.
Alsogaray (h) relató que Bussi les mostró a sus padres una foto en la que se veía a Juan Carlos con el rostro ensangrentado y desfigurado. Esto generó el llanto de la madre, Zulema Legorburu, quien en medio de su dolor fue reprendida por Bussi.
En su testimonio, Alsogaray (h) insistió en que, cuando Bussi se hizo cargo de la intervención de Tucumán tras el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, recibió un informe del general Acdel Vilas, según el cual la guerrilla urbana y rural "había sido exterminada en la provincia".
"En la Argentina no hubo ninguna guerra, sino un terrorismo de Estado y un grupo de militantes revolucionarios, como mi hermano, que, equivocados o no, fueron exterminados", destacó Alsogaray (h) en diálogo con la prensa.
Bussi, actualmente bajo una polémica detención domiciliaria, encabezó la V Brigada de Infantería entre diciembre de 1975 y 1977, y a partir del golpe de Estado procesista ejerció la intervención militar de la provincia, período durante el cual desaparecieron o fueron asesinadas centenares de personas.