Si bien se fueron acostumbrando a los tiros nocturnos y a dos o tres personas paradas en las esquinas vendiendo drogas, los vecinos de Cisnero al 6300 —barrio La Lagunita— no se acostumbran a contar muertos. Hace tres meses mataron allí Jonatan Suárez y la noche del miércoles la víctima fue Lucas Ciliani. Hacía un mes que el joven de 26 años daba vueltas por la zona vendiendo para uno de los cinco o seis búnkeres que hay sobre Cisnero.
En esa calle desembocan cortadas estrechas donde abunda el barro y la noche del miércoles Lucas estuvo parado allí, en la esquina con Campbell. “Daba vueltas, iba de un lado a otro de la esquina cuando se le acercó un matón. Hablaron dos minutos y ese pibe sacó un arma y le empezó a tirar. Primero le dio seis tiros y se alejó media cuadra o menos. Volvió y cuando el pibe estaba tirado le disparó cuatro más”, contó un vecino, que aseguró no conocer al tirador. Más tarde la policía secuestró tres vainas calibre 9 milímetros.
Un vecino levantó a Lucas y lo llevó al Hospital Clemente Alvarez. “Lo cargué pero casi no tenía sangre. Era raro, no hablaba, estaba como desmayado. Se ve que los tiros lo lastimaron por dentro. No vi quién disparó ni me dijo nada. Ya estaba medio muerto, pobre. Y no lo conocíamos del barrio”, contó el hombre que sabía que no habría ambulancia que se acercara a ese lugar para que el chico fuera asistido.
Al llegar al Heca, los médicos de la guardia constataron balazos en tórax y pierna derecha de Lucas. Fue ingresado al quirófano pero pasadas las 22 se confirmó su deceso.
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Vecinos de otras cortadas contaron que hace un año el barrio era distinto pero ahora los tiros son habituales a la noche. Casi todos se dedican a la construcción o trabajan en servicios. Casi nadie conocía a Lucas. “No era de acá. Decían que trabajaba para Los Monos. Hay muchos búnkeres y el pibe soldadeaba para uno sobre la cortada. Viene mucha gente de otros barrios a comprar”.
En el barrio recuerdan que el 5 de marzo pasado en Campbell y Cisnero mataron a Jonatan Suárez, de 24 años. Estaba con tres personas que lo golpearon y luego le dispararon varias veces en cráneo, espalda y piernas: “Ese pibe también vendía”, dijo otro vecino.
Policía en aguantadero
En el documento de Lucas Ciliani figuraba la dirección de un galpón de La Paz al 5000. En el mismo domicilio a fines de abril había sido detenido Darío “Viejo” Protti, un ex policía de 58 años imputado como parte de una asociación ilícita liderada desde la cárcel por miembros de Los Monos. Desde la Fiscalía indicaron que ese domicilio es en realidad un galpón en el que hay algunas habitaciones. Una especie de pensión pero que, dada las características conocidas a partir de estos hechos, podría funcionar como aguantadero. También, aunque sin profundizar en detalles, confirmaron que Ciliani tenía antecedentes penales. La fiscal Marisol Fabbro ordenó la toma de testimonios y un relevamiento de la zona en busca de cámaras y testigos.
Protti fue detenido el viernes 28 de abril. Había sido exonerado de la policía tras una condena a 4 años de prisión con otro agente por el crimen de Ariel Colque, de 16 años, baleado por la espalda en Magallanes al 2400 el 30 de marzo de 1998. Tras un largo trámite fue condenado bajo la polémica figura de homicidio en riña en 2004, casi dos décadas antes de caer sospechado de brindar servicios a una banda narco.
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Luego de su detención el fiscal de Balaceras Pablo Socca le imputó pertenecer a una asociación ilícita que según la acusación de la Fiscalía estaba liderada desde la cárcel por personas vinculadas a Los Monos: Matías “Pino” César, Andy Benítez y Julián Aguirre. En la calle la banda funcionaba principalmente en el barrio Ludueña, donde bajo las órdenes de los luego detenidos e imputados Mauro Gerez y Jonatan Almada llevaba a cabo extorsiones a comerciantes y vecinos, balaceras, homicidios y venta de drogas.
En ese marco Protti fue acusado de recaudar el dinero de narcomenudeo, conseguir armas, amenazar a deudores y coordinar a los sicarios. Además Socca le atribuyó “participar de las extorsiones junto con un grupo de jóvenes que le responde y lo acompaña”.