En ese sentido, Martín manifestó su preocupación por los indicadores de
pobreza difundidos por la Universidad Católica Argentina (UCA). "El año pasado arrojó 29 puntos y este año, haciendo una proyección, daba alrededor de cinco puntos más. Esto significa familias, niños y gente que sufre", lamentó.
Por su parte, Matías Layús, titular del gremio que nuclea a los empleados bancarios, apuntó que "la situación es demasiado delicada por los desempleos que se están dando en sectores muy específicos como la metalúrgica y el comercio, propio de la recesión económica y la falta de consumo". Es por eso que decidieron compartir la inquietud con las autoridades eclesiásticas de la ciudad para reflexionar acerca de la situación actual.