“En 2019, cuando fue el último encuentro de estas características, hablamos de lo mal que estaba el sector, hoy llevamos muchos meses de un crecimiento que vino para quedarse, no es un rebote”. Así lo dijo el presidente de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), Víctor Sarmiento, durante el almuerzo que realizó la entidad en Rafaela para celebrar el Día de la Industria.
Fue el reencuentro presencial luego de tres años. En el medio, estuvo la pandemia, un período durante el cual “la industria estuvo a la altura, fabricando los insumos necesarios para atender la emergencia sanitaria”, recordó Sarmiento. El empresario agradeció el acompañamiento de los gobiernos nacional y provincial.
En el mismo ámbito, el gobernador Omar Perotti subrayó el esfuerzo de los industriales por “mantener en pie” al sector productivo santafesino. Y el secretario de Desarrollo Productivo de la Nación, José Ignacio De Mendiguren, recordó que el gobierno enfrento el desafío de la pandemia con el “mayor rescate a las pymes” que haya conocido el país.
El cambio de modelo fue crucial. De Mendiguren recordó que “a algunos les costó un tiempo darse cuenta que el gobierno anterior era anti industrial” y aseguró que el actual está dispuesto a acompañar al sector para transformar el crecimiento en desarrollo.
Sarmiento coincidió: “Hoy llevamos muchos meses de crecimiento industrial y no es un rebote pospandemia sino un crecimiento que vino para quedarse”, enfatizó. Y destacó la recuperación de 19 mil puestos de trabajo en Santa Fe durante los últimos tres años, el 20% del empleo industrial que se recuperó en el país.
Pero al mismo tiempo repasó los desafíos actuales. Al gobierno provincial, al que elogió entre otras cosas por la instrumentación del nuevo régimen promoción industrial, le pidió más infraestructura. Y al nacional, mayor disponibilidad de dólares para la importación de insumos.
De Mendiguren aseguró que el gobierno logró estabilizar la situación luego de la crisis política y cambiaria de julio. “Hace pocas semanas nos decían que la devaluación era inexorable, que íbamos camino a un default en pesos y otro montón de cosas que no pasaron”, desafió. Y aunque reconoció que la Argentina tiene hoy “un problema de caja chica” garantizó que no se va a entregar “el proyecto nacional” para resolverlo. “No vamos a sacar el presupuestó al Inta o al Inti ni vamos a mandar a lavar los platos a los científicos del Conicet”, dijo.
El funcionario recordó que entre 2002 y 2011 la economía vivió el período más extenso de crecimiento de la historia del país. Pero advirtió que crecer no es lo mismo que desarrollarse. Y arengó: “No hay país industrial del mundo que se haya desarrollado con tasas pornográficas, con retraso cambiario o con aperturas infantiles”.
El presidente de Fisfe, en tanto, destacó la creación de Fisfe Joven, la gestión para elevar el corte de gasoil con biodiesel, la puesta en marcha de las prácticas pre profesionalizantes, y la ampliación de las zonas y parques industriales.
Perotti defendió los programas para capacitar trabajadores y el apoyo a la ciencia y tecnología. Especialmente la creación del fondo de inversión tecnológica SF500.