La conductora de TV Barbie Simons pensaba tomarse unos días de descanso junto a su pareja, Maximiliano Klevelich, en uno de los parajes más paradisíacos de Uruguay, la playa de San Ignacio en Punta de Este.
La conductora de TV Barbie Simons pensaba tomarse unos días de descanso junto a su pareja, Maximiliano Klevelich, en uno de los parajes más paradisíacos de Uruguay, la playa de San Ignacio en Punta de Este.
Y para tal fin, decidió instalarse en uno de los hoteles de lujo de esa región, Anastasio. Lo que no tuvo en cuenta fue que lujo no siempre va acompañado de higiene y mantenimiento y excelente atención, y que lo estaba previsto como unas vacaciones relajadas terminó siendo una pesadilla.
“Habitaciones de U$S 520 y colchones con pulgas. Mi novio y yo con con picaduras en todo el cuerpo hace días”, posteó Barbie en su cuenta de Instagram.
El enojo de Simons no sólo se focalizó por la acción de los insectos. “No sólo eso. Sino que además nos dieron sábanas con una mancha (nunca en cuatro días fueron capaces de cambiar la sábana hasta que nos quejamos). Acá más de las pruebas del deplorable servicio de mantenimiento de un hotel en Punta del Este que te cobra 500 dólares la noche. De cuarta el servicio de este supuesto hotel de lujo”, remarcó.