Una persona murió y otra resultó con severas quemaduras luego de que delincuentes les robaran y prendieran fuego la garita en la que estaban trabajando.
Una persona murió y otra resultó con severas quemaduras luego de que delincuentes les robaran y prendieran fuego la garita en la que estaban trabajando.
Sucedió en un obrador en San Lorenzo, donde las dos personas estaban trabajando como serenos de una empresa subcontratista de la construcción que realiza trabajos en esa ciudad.
Las personas fueron abordados a la madrugada por ladrones, quienes tras apoderarse de las pocas pertenencias que tenían, los encerraron en la garita, los ataron por fuera y luego de rociarlos con nafta los prendieron fuego.
Una vez que se inició el fuego se empezaron a escuchar los gritos desesperados de ambos serenos, por lo que algunos vecinos que alcanzaron a escucharlos se llegaron hasta el lugar, pero solo pudieron rescatar a uno, Héctor Avila, de 53 años, quien resultó con severas quemaduras en su cuerpo, mientras que la otra persona falleció calcinada.
"Llegando a las dos de la mañana entran a robarle a él y a la otra persona que estaban cuidando el lugar, los roban, los encierran en la misma casilla, los atan por fuera y les prenden fuego", señaló una mujer, que mencionó ser "compadre" de Avila, el hombre que logró sobrevivir, más allá de las quemaduras de "segundo grado en la oreja, la cara y uno de los brazos".
"Los vecinos al sentir los gritos de deseparación los socorren, sacan primero a mi compadre y al otro chico no hubo manera de sacarlo, murió calcinado", lamentó la mujer.
Tras los primeros cuidados, Avila fue trasladado hoy al Hospital de Emergencias "Clemente Alvarez", donde está internado en la sala de quemados. "Le realizaron curaciones más profundas, ya pasamos para verlo, es nuestro compadre y es una excelente persona", dijo la mujer, mientras el hombre estaba con un bendaje que le curbía toda la cara.
Por Rodolfo Montes
Por Eugenia Langone