Lanzado de lleno en la campaña electoral, el gobernador Omar Perotti envió un proyecto a la Legislatura para ampliar el derecho de voto en la provincia y sumar a los jóvenes de entre 16 y 18 años. De aprobarse la iniciativa, el sufragio para las personas que integran esa franja etaria sería optativo, de la misma forma que a nivel nacional. De todos modos, el trámite no será sencillo: en la oposición, que domina la Cámara de Diputados, deslizan que la movida es “un globo de ensayo electoral” y dudan sobre su constitucionalidad.
“Uno de los principios de la democracia es la ampliación de las bases de participación política asignando a la mayor cantidad de personas posible su intervención en la elección de sus autoridades. En tal sentido, el voto de los más jóvenes incrementa la participación electoral”, señala el mensaje n° 4949, firmado por el gobernador.
Y agrega: “Cada vez más jóvenes se involucran para tratar de transformar la realidad a través de la práctica política. Hace casi una década que pueden hacerlo, además de en las aulas, los colegios y los barrios, también en las urnas. Pero en el caso de la provincia de Santa Fe, pueden hacerlo únicamente para los cargos nacionales, es decir, pueden elegir al presidente y vicepresidente, a los senadores nacionales, a los diputados nacionales, pero no pueden elegir a las autoridades locales”.
El proyecto destaca como antecedentes a la Ley de Ciudadanía, aprobada por el Congreso en 2012, y las sucesivas leyes que dictaron las provincias para adecuarse a la ley nacional. “A la fecha, el voto joven sólo no está previsto en la provincia de Corrientes y Santa Fe”, destaca el mensaje del gobernador.
La iniciativa no tendrá un trámite sencillo en la Legislatura
La iniciativa reconoce un obstáculo: la Constitución provincial. En su artículo 29, la Carta Magna santafesina establece que “son electores todos los ciudadanos, hombres y mujeres, que hayan alcanzado la edad de diez y ocho años y se hallen inscriptos en el Registro Cívico Provincial”.
Una de las formas de saltarlo es poner por encima la Constitución Nacional. “La norma constitucional provincial no debe entenderse como una restricción a la ampliación de este derecho, sino que debe ser interpretada de manera sistemática, armónica y dinámica con los preceptos de la Constitución Nacional y con los instrumentos internacionales de derechos humanos con jerarquía constitucional incorporados en el artículo 75 inciso 22 de la Constitución Nacional”, indica el gobernador en su escrito, firmado también por el ministro de Gobierno, Roberto Sukerman.
Otro argumento es que al no haber referencia en la Constitución santafesina al voto de las personas entre 16 y 18 años se entra en un “ámbito de discrecionalidad legislativa”.
El constitucionalista Domingo Rondina se mostró a favor del proyecto. “Si con el paso del tiempo la norma constitucional provincial queda opuesta a un derecho más relevante establecido por la Constitución Nacional o por los tratados internacionales puede quedar derogada por imperio de una norma superior”, señaló el especialista.
Globo de ensayo
En el Frente Progresista expresaron sus reservas con el proyecto. “Perotti se acordó tarde de los jóvenes, este gobierno tiene el triste mérito de haber desarmado las áreas de juventud. Ahora en época electoral lanza un globo de ensayo sobre voto joven y no hay ningún problema, salvo la Constitución de la provincia que el peronismo nunca quiso y Perotti no se atreve a reformar”, disparó el presidente del bloque socialista en Diputados, Joaquín Blanco.
Y agregó: “Vamos a debatirlo en el marco de si quieren reformar o no la Constitución, esto parece un globo de ensayo igual que la autonomía municipal. ¿Qué pasó con las jornadas de reflexión que iban a convocar para discutir la autonomía?”.
Para el presidente del bloque socialista en Diputados, Joaquín Blanco, la movida de Perotti es un "globo de ensayo"
En la oposición leen que avanzar con ciertas leyes sin reformar la Constitución podría generar un peligroso antecedente en temas más urticantes, como la prohibición de la reelección del gobernador.
En esta línea, el constitucionalista Oscar Blando, director de Reforma Política y Constitucional durante el gobierno de Miguel Lifschitz, se mostró a favor de la ampliación de derechos y propuso un debate público y amplio, pero advirtió: “Una modificación constitucional por una vía que no es la que establece la propia Carta Magna abre una puerta negativa para que se reformen de este modo otras cuestiones”.
Igual, la posición en el Frente Progresista no es homogénea. El diputado provincial Rubén Giustiniani, que volvió al espacio y competirá en las Paso dentro de la alianza que reúne a socialistas, radicales y otros espacios de centro-izquierda, presentó con su compañera de bancada Agustina Donnet un proyecto de voto joven casi calcado al que elaboró la Casa Gris.