El presidente Alberto Fernández afirmó ayer que "el coronavirus es un enemigo invisible y, por momentos, indescifrable". No obstante, enfatizó: "Lo estamos combatiendo unidos, con compromiso y solidaridad. Si seguimos por este camino, tendremos éxito".
El primer mandatario se expresó de ese modo en un escrito a modo de balance a través de las redes sociales, con el título "Un mes de aislamiento social, preventivo y obligatorio".
"Mientras algunos en el mundo se burlan e ignoran las advertencias de la comunidad médica y científica, nosotros las observamos y comprendemos la necesidad de quedarnos en nuestras casas. Por eso, estoy muy orgulloso de nosotros como pueblo y sé que, cuando todo esto pase, tendremos la fortaleza necesaria para volver a ponernos de pie", sostuvo.
Al hacer una evaluación del primer mes de aislamiento obligatorio, que se inició el 20 de marzo pasado y fue prorrogado hasta el domingo próximo, Fernández agradeció "a las decenas de millones de personas que se quedaron en sus casas e hicieron posible lo que hoy es un orgullo para todos: que el contagio no se dispare y nuestro sistema de salud pueda estar en condiciones de recibir a cada argentino y cada argentina que lo necesite".
Además, renovó su agradecimiento para los trabajadores de actividades "esenciales" que cumplieron tareas durante este mes, especialmente a los del sector salud", y reiteró que de la pandemia "nadie se salva solo".
"El coronavirus es un enemigo invisible y, por momentos, indescifrable. Pero lo estamos combatiendo unidos, con compromiso y solidaridad. Si seguimos por este camino, no tengo dudas de que tendremos éxito", indicó el mandatario.
Sacrificios
En el comienzo del mensaje, el presidente sostuvo: "Los argentinos cumplimos un mes de aislamiento social preventivo y obligatorio. Sé que no fue fácil. Todos debimos alterar el ritmo de nuestras vidas, modificar los hábitos de trabajo, posponer planes, suspender estudios, reprogramar viajes y hasta evitar los abrazos y los besos de aquellos a los que amamos".
En ese plano, el jefe del Estado manifestó saber que la "cuarentena no es fácil y que algunos la sufren particularmente", pero analizó: "Nunca debe ser un padecimiento cuidar de nosotros mismos, porque no tenemos ningún bien más preciado que nuestras propias vidas".
"Por eso, estamos haciendo todo lo necesario para que este tiempo de mayores cuidados que debemos transitar nos afecte lo menos posible. Todos deseamos volver cuanto antes a nuestra normalidad", subrayó.
Acerca de la inversión del Estado para afrontar el impacto económico de la pandemia y la cuarentena, el presidente resaltó que se invirtió hasta el momento "casi un 3 por ciento" del producto bruto (PBI) para cuidar los ingresos, la producción y el trabajo en el marco de la emergencia sanitaria".
"Es la mejor muestra del esfuerzo que hacemos entre todos para sobrellevar el momento", enfatizó Fernández.