El inicio de las negociaciones con el gobierno británico para implementar la participación argentina en las exploraciones de hidrocarburos en Malvinas, además de la pesca y el comercio, dividió las aguas entre ex funcionarios y especialistas en relaciones internacionales.
El ex secretario de Asuntos Relativos a Malvinas, Daniel Filmus; el ex canciller Jorge Taiana y la ex embajadora en Venezuela Alicia Castro rechazaron la iniciativa al considerar que resigna la soberanía argentina sobre el archipiélago.
En tanto, el ex vicecanciller Andrés Cisneros, el ex embajador argentino en Londres Vicente Berasategui y el especialista en temas internacionales Jorge Castro celebraron la vuelta al diálogo con el Reino Unido.
Para Filmus, "esta propuesta implica volver a las políticas de los 90, cuando se firmaron acuerdos para explorar y explotar de forma conjunta en la zona de Malvinas, y el Reino Unido desconoció todo lo firmado". "Después de aquella experiencia, reiterar esta propuesta no solo lesiona los intereses de Argentina, sino que lesiona la soberanía", agregó.
Filmus vinculó el acuerdo con la postulación de la canciller Susana Malcorra a la secretaria general de la ONU, y dijo que "poner en juego nuestra soberanía a cambio de una candidatura no tiene sentido".
Por su parte, Taiana remarcó que "en materia de hidrocarburos, el Reino Unido invita a Argentina a contribuir a alivianar el camino para que sus acciones unilaterales de exploración y explotación ilegal en el Atlántico Sur no enfrenten medidas restrictivas ", y que "se trata de desmontar las medidas legales a las que ha venido acudiendo nuestro país para resguardar sus derechos y sus recursos naturales no renovables por tratarse, además, de acciones prohibidas por la ONU".
A su turno, Alicia Castro denunció que "con esta propuesta Malcorra quiere dejar en claro que, si fuera electa como secretaria general de la ONU, no reforzaría el reclamo argentino por Malvinas".
Por el contrario, Berasategui remarcó que "es importante acordar un documento de trabajo con la parte británica; es algo compresivo y abre posibilidades de negociación en diversas áreas".
El embajador argentino en Londres durante las gestiones de Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde celebró que el acuerdo "restablece las consultas políticas de alto nivel, que quedaron paralizadas en 2003, y es un hecho bienvenido que reaparezcan las reuniones anuales" entre ambos países.
Por su parte, Cisneros aseguró que el camino adoptado por Malcorra "está muy bien" y destacó que recoge ideas que se habían impulsado durante su gestión como vicecanciller de Carlos Menem y la de Dante Caputo en el alfonsinismo.
"Lo que están haciendo es poner sobre el tapete la larga noche del kirchnerismo, que en Malvinas hizo todo lo contrario, y nos llevó a la hostilidad. Ahora, de vuelta, estamos en la construcción de sensateceses", analizó.
En tanto, Jorge Castro señaló que el acuerdo es "una innovación importante" que "permite colocar el tema Malvinas en su verdadera dimensión", es decir "ver como la Argentina participa de la explotación de su recursos". Además, sostuvo que puede ayudar a que el país "profundice su vínculo con el sistema financiero internacional gracias al fuerte peso que tiene Gran Bretaña sobre ese esquema".
Recalde. A todo esto, el presidente del bloque de diputados por el FpV-PJ, Héctor Recalde, pidió que Malcorra "concurra con urgencia a la comisión de Relaciones Exteriores para dar explicaciones sobre el acuerdo" con el Reino Unido por Malvinas, y consideró: "La ambición personal por obtener un cargo no puede justificar el renunciamiento a la defensa de la soberanía argentina sobre Malvinas. No es admisible que entreguemos nuestros recursos pesqueros y petrolíferos por un voto en la ONU".