Voceros de la empresa Botnia confirmaron ayer un derrame de pasta de celulosa en estado semilíquido
ocurrido anteayer en su planta de Fray Bentos , ocurrido cuando se intentaba reiniciar la
producción en la inmensa factoría. De todos modos, aclararon que se trató de un incidente de
“ínfimas” proporciones y que no amenaza las aguas del río Uruguay.
En cambio, los asambleístas de Gualeguaychú afirmaron que el episodio
“confirma que la planta no es segura” y que es “muy alto el riesgo de un
accidente de dimensiones impredecibles”.
Diego Núñez, vocero de Botnia en Buenos Aires, admitió el derrame de
celulosa semilíquida, aunque relativizó el incidente al sostener que el volcado fue “ínfimo,
casi insignificante”, y que de ninguna manera podría llegar al río Uruguay..
“No sé por qué hablan de una explosión en un silo; en la planta no
hay silos porque no hay acopio de pasta de celulosa, lo que hubo fue un avería en la tubería
principal en el sector de secado”, explicó Núñez.
El vocero señaló que la rotura se produjo cuando se intentaba reiniciar
la producción luego de haberse interrumpido la marcha de la caldera principal de la planta.
“El pequeño derrame se produjo próximo a las oficinas centrales,
que se encuentran a unos 2000 metros del río, por lo que es imposible que el derrame llegue hasta
allí”, precisó el vocero. Luego agregó que si así fuera “no produciría ningún efecto
contaminante” en sus aguas ya que —comparó— sería “como tirar un papel
secante al agua”.
Núñez dijo además que técnicos de Botnia trabajan sobre el desperfecto y
que “posiblemente mañana (por hoy) retome su producción”.
Sobre el accidente que produjo quemaduras de primer y segundo grado en
uno de los operarios cuando cumplía tareas en la caldera de recuperación, señaló que está fuera de
peligro y trabajando.
El diario El País de Montevideo identificó al operario accidentado como
Ludwig Wolfgang, de 39 años y nacionalidad finlandesa, y precisó que sufrió quemaduras en los dos
brazos y parte del cuello y que fue trasladado en ambulancia a una clínica de Fray Bentos.
Núñez negó que personal de Botnia haya retirado los celulares a los
camioneros que transportan materia prima a la planta para evitar que saquen fotos en el sector
donde se produjo el derrame.
“Los camioneros no llegan hasta ahí, ni tienen acceso al lugar del
accidente; los rollos (troncos) se descargan en la primera parte del proceso; entran, dejan los
rollos y se van”, explicó.
Las radios uruguayas Máxima y El Espectador desmintieron en parte el
informe de Núnez al informar que en Botnia ayer se trabajaba a destajo “para impedir que la
sustancia contaminante llegara al río Uruguay”, recurso hídrico que comparten Argentina y
Uruguay, y que —según aseguran los asambleístas— se encuentra amenazado por la
presencia de una industria altamente contaminante.
Peligro latente. El asambleísta Juan Veronesi señaló, por su parte, que los accidentes como
el de anteayer “son conocidos en todas las experiencias de pasteras en el mundo” y que
lo “que agrava la situación aquí es que se trata de una de las pasteras más grandes que
existen”.
El también asambleísta Gustavo Rivollier, apoyándose en testimonios de
camioneros que se encuentran trabajando en la planta, negó que el derrame haya sido pequeño.
“La pasta de celulosa se está recolectando con palas mecánicas
para ser transportada en los camiones al lugar donde la van a enterrar. ¿Esto es un derrame
ínfimo?”, se preguntó Rivollier. l