El dueño de un local de Rapipago y correo privado de San Juan al 700 denunció que dos hombres
que se movilizaban en moto le sustrajeron unos 160 mil pesos a punta de pistola tras amenazar a una
empleada que estaba en la caja. Luego, un muchacho que pasaba en moto frente al local vio salir a
uno de los ladrones del comercio empuñando un arma y con una caja bajo un brazo y no dudó en
perseguir a los asaltantes hasta Corrientes y Pellegrini, donde los perdió de vista.
Minutos después del golpe el propietario denunció lo ocurrido a efectivos del Comando
Radioeléctrico. Ese relato breve que brindó el dueño del negocio tras la conmoción del asalto era
uno de los escasos elementos con que contaban anoche los investigadores para reconstruir el
episodio. Es que, según indicaron fuentes policiales, en la comisaría 1ª esperaban que el
comerciante se presentara a ampliar la denuncia y aún no habían podido obtener el testimonio de la
empleada que fue amenazada por los ladrones.
De acuerdo con el acta labrada por el Comando Radioeléctrico instantes después del asalto, el
robo se produjo en el local de servicio postal Western Union de San Juan 714. Fue a las 11.40 de
ayer, en el momento en que el propietario, José M., de 69 años, se encontraba en una oficina
posterior controlando una transferencia de dinero realizada por ciudadanos chinos. En ese instante
irrumpió en el negocio un ladrón armado. El asaltante forcejeó con una empleada de 26 años que se
ocupaba de la atención al público, la amenazó con un arma y la condujo al sector donde estaba el
dueño.
Billetes en caja. Según indicaron fuentes policiales, allí el ladrón encañonó a ambos con un
arma de fuego y le exigió a M. que depositara el dinero en una caja de cartón. “No sabemos si
a la caja la había traído él o la consiguió ahí en el local”, indicó un portavoz policial. El
dueño, de acuerdo con la denuncia, colocó en la caja una suma que ronda los 160 mil pesos. Con el
dinero encima, el asaltante corrió hasta la vereda donde lo esperaba su cómplice y escaparon en una
moto negra tipo enduro.
Persecución. La huida de los ladrones fue observada por un motociclista que justo pasaba
por el lugar y decidió seguirlos. Los corrió por Laprida hasta Pellegrini. Allí los delincuentes
tomaron por la avenida hacia el oeste y el motociclista los perdió de vista al llegar a Corrientes,
según reveló luego al presentarse en el local y detallar la persecución.
En el negocio también funcionan una sucursal de la cadena Rapipago y varias cabinas telefónicas.
Desde allí llamaron al 911 y dieron cuenta de lo ocurrido. “El robo existió pero los dueños
están haciendo la denuncia”, indicó más tarde a este diario un empleado, quien se excusó de
brindar más precisiones. Anoche en la comisaría 1ª, que interviene por razones de jurisdicción,
esperaban contar con el relato del propietario para conocer más detalles del caso.
El mismo negocio había sido blanco de un robo con una modalidad similar el 30 de julio de 2008,
aunque entonces el monto obtenido por los ladrones había sido más modesto: 1.500 pesos. En esa
ocasión el hecho fue también al mediodía, a las 12.30, cuando dos hombres armados entraron en el
momento en que algunos clientes hacían cola frente a la caja para pagar impuestos. Uno de los
ladrones vestía una campera blanca y negra, otro un suéter negro. Sin rodeos, uno de ellos fue
hasta la caja y sustrajo el dinero. Se fueron caminando. En esa ocasión, el robo fue denunciado a
la Patrulla Urbana y luego intervino la comisaría 1ª.