La policía confirmó la denuncia por abuso de arma de fuego. Este jueves por la noche, un testigo escuchó las detonaciones dentro del predio
Foto: Celina Mutti Lovera / La Capital
Los balazos alteraron la actividad deportiva en pasaje Tesla al 2000.
Foto: Celina Mutti Lovera / La Capital
Foto: Celina Mutti Lovera / La Capital
Por segunda vez en poco más de un mes, la policía rosarina abrió una investigación sobre balazos frente a un club. En este caso no se registraron personas heridas, aunque las autoridades constataron que alguien disparó al menos 15 veces cerca del complejo deportivo de la zona oeste.
La pesquisa se puso en marcha por el llamado de un testigo desde el Ateneo Infantil Nuestra Señora de la Rocca. A partir del aviso a través del 911, agentes del Comando Radioeléctrico fueron a patrullar el lugar, pero no dieron con ningún sospechoso o declaraciones que permitan reconstruir lo ocurrido a las 20.30.
La denuncia dio paso a un rastrillaje en torno a la esquina de Cerrito y pasaje Tesla en busca de evidencia. En total, los efectivos encontraron 15 vainas servidas sobre esta última calle, frente a la entrada principal al predio.
El hombre que llamó a la policía confirmó que estaba dentro del club de fútbol infantil cuando escuchó las detonaciones. En primera instancia, los efectivos no encontraron rastros de impactos de proyectiles sobre la fachada de la institución.
El testigo salió a la calle por el ruido de los balazos y confirmó lo que presumía: alguien había utilizado un arma de fuego cerca de la cancha. No obstante, en ese momento no había ningún sospechoso a la vista.
>> Leer más: Identificaron al hombre asesinado el lunes en la puerta de un club de la zona oeste
El episodio tuvo lugar cerca de la plaza Berti, lindera con el predio de pasaje Tesla al 2000. Hacia el este, en la vereda opuesta de la calle Camilo Aldao, se ubican la Escuela 1190 Nuestra Señora de la Rocca y la parroquia que lleva el mismo nombre.
Un vecino del ateneo escuchó entre ocho y diez disparos al aire mientras estaba en su casa, aunque tampoco llegó a ver a la persona que abrió fuego. "Cuando abrí la cortina, vi que salían los chicos. No creo que haya sido contra el club", comentó. Por otro lado, fuentes consultadas por LT8 aclararon que a esa hora no había práctica de fútbol infantil debido a las vacaciones de invierno, pero un grupo de jóvenes había alquilado la cancha para jugar.
A mediados de junio, otra entidad deportiva de la zona oeste rosarina fue el telón de fondo de un crimen. Un grupo de personas fue acribillada a metros del Club Social y Deportivo Defensores de Lavalle, en Casella al 1800, donde Pablo Alderete (36) murió por seis heridas.
Por Hernán Cabrera