Tras asegurar dos veces que había dado negativo en las pruebas por coronavirus y anunciar un posible tercer análisis, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró ayer que "tal vez" ya se infectó con el virus y que ahora "tiene anticuerpos", una declaración que coincidió con un reporte oficial que subió hasta 11 la cantidad de muertos en el país.
"Acá en casa, toda la familia dio negativo. Tal vez yo ya fui infectado antes y no lo sabía. Tal vez. Y tengo anticuerpos", afirmó el mandatario, citado por el diario O Globo, luego que subiera a 22 la cantidad de personas que dieron positivo y que estuvieron con él y con Donald Trump en su comitiva en Estados Unidos hace dos semanas.
Bolsonaro hizo las declaraciones a la salida del Palacio de la Alvorada, la residencia presidencial, luego de mantener una videoconferencia con empresarios de la Federación de Industrias del estado de San Pablo y comunicarles que redujo de 2,10 a 00,2 por ciento el crecimiento del PBI para 2020, tras la primera evaluación de la crisis.
Las asociaciones de empresarios de comercios en shoppings ya prevén cinco millones de despidos este año en el sector.
En paralelo, el Senado de Brasil aprobó de forma remota el "estado de calamidad" en el país, luego de que las autoridades informaran el nuevo balance de víctimas de la pandemia: 11 muertos y más de 620 casos positivos de coronavirus.
La medida, que ya tenía media sanción, fue aprobada por 75 de los 81 senadores.
La declaración de un estado de calamidad permitirá al gobierno nacional aumentar el gasto público e incumplir el objetivo fiscal establecido para este año, lo que permitirá inyectar más fondos a la lucha contra pandemia.
Según informó el gobierno del estado de San Pablo en un comunicado, cuatro personas mayores de 70 años murieron en las últimas 24 horas, lo cual elevó hoy a 11 los fallecidos en Brasil, el país que registra más decesos en América Latina desde el inicio de la pandemia.
Las últimas víctimas fatales son una mujer de 83 años y tres hombres de 70, 80 y 93, todas fallecidas en sanatorios privados. Más temprano, otras dos personas habían fallecido en el estado de Río de Janeiro.