La candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, fue la más votada para presienta en Funes.
La ciudad de Funes se convirtió, como pocas, en un claro ejemplo de la diferencia que puede hacer el electorado entre proyecto político nacional y gestión local. Mientras el intendente peronista Roly Santacroce retuvo recientemente su cargo con un 75 por ciento del electorado a su favor, los funenses optaron por la propuesta de Juntos x el Cambio, seguida de la de La Libertad Avanza. Y entre las propuestas, ratificaron la tendencia claramente antiperonista del electorado.
Según los datos recogidos por medios locales, Patricia Bullrich resultó ganadora en esa ciudad con 8.418 votos, seguida en segundo lugar por Javier Millei, con 7.973. El candidato oficialista Sergio Massa quedó tercero con 5.490. Los candidatos Juan Schiaretti y Miriam Bregman apenas pasaban, muy por detrás, los mil votos.
Lo llamativo resultó que entre las propuestas opositoras al actual gobierno nacional sumaron casi 16.400 votos, triplicando así a la voluntad de que el peronismo continúe en el poder para decidir en los próximos cuatro años los destinos del país.
Llamativo también teniendo en cuenta que para las elecciones a intendente, la tendencia fue al revés entre las principales fuerzas. El candidato oficialista Santacroce se alzó con 15.283 votos, es decir, el 75,21 por ciento de los votos.
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En total al votaron 24.515 personas.
La “isla de Funes” tampoco siguió la tendencia del departamento Rosario, al que pertenece, y donde Sergio Massa obtuvo el 34,56 por ciento de los votos, seguido de Milei, con 28,89 por ciento, y Bullrich (26,81%). Es decir, al revés.
Como último dato, la tercera diputada nacional que coloca La Libertad Avanza, Rocío Bonacci, es vecina de esa ciudad.
Está claro que la población del Jardín de la Provincia dividió las aguas y separó proyecto político de gestión. Y que cuando en un lugar se consolida un liderazgo local, el electorado acompaña, pero no compra el combo.
Unión por la Patria (UxP) logró este domingo una contundente victoria al posicionarse Sergio Massa como el candidato presidencial más votado con el 36,66% de los votos en los comicios nacionales y, de esta forma, el oficialismo consiguió revertir los resultados de las Paso y relegar a un segundo lugar al aspirante a la Casa Rosada de La Libertad Avanza, Javier Milei, quien obtenía el 30%.
Con estos porcentajes, la elección de un nuevo gobierno quedó atada a lo que suceda en el balotaje -previsto para el 19 de noviembre- entre Massa y Milei, luego de que quedaran fuera de competencia los otros tres postulantes a la Presidencia: Patricia Bullrich, de Juntos por el Cambio (JxC); Juan Schiaretti, de Hacemos por Nuestro País (HxNP) y Myriam Bregman, del Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT).
Los números modificaron la paridad de tres tercios exhibida en las Paso, pero no alcanzaron para consagrar al nuevo gobierno porque la ley electoral establece que debe haber 10 puntos de diferencia entre el candidato más votado y el segundo si ninguno de ellos supera el 45% de los sufragios.
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Escrutado el 98% de las mesas, Milei lograba un apoyo en las urnas de 30 puntos, casi similar a lo que ya había conseguido en las primarias abiertas simultáneas y obligatorias de agosto último, pero Massa mostraba una notable recuperación, de unos 9 puntos porcentuales, con respecto al 27,7% obtenido en las Paso por su fórmula más la que encabezaba Juan Grabois.
Por el contrario, Bullrich retrocedía de un 28,24% de votos al 23,83%.
Por Eugenia Langone
Por Guillermo Zysman