Los trabajos del nuevo ingreso ferroviario a las terminales del Gran Rosario ya comenzaron. Se trata de una obra que facilitará el ingreso a los puertos ubicados en la zona de Timbúes a los que hoy sólo se accede por camión. La obra demandará una inversión total de 4.680 millones de pesos, de los cuales el 70 por ciento será de aportes privados y el resto del Estado nacional.
Cuando finalicen las obras, el ingreso se hará en forma directa por tren, conectando por primera vez la vía principal del Belgrano Cargas con cinco de los puertos cerealeros más grandes del país. Esto agilizará el embarque de granos en los buques cerealeros para su exportación y generará 1.500 nuevos puestos de trabajo.
Con la puesta en marcha del ingreso ferroviario, el año próximo habrá llegado el primer millón de toneladas vía tren a cinco nuevas terminales. Sumado a las 700 mil toneladas que hoy en día ya ingresan por año al resto de las terminales del Gran Rosario, el crecimiento será del 142 por ciento.
Para esto, ya se comenzó la etapa de inicio del obrador, desmalezado, destape de suelo vegetal y apertura de traza.
La obra se lleva adelante en el marco del plan de recuperación del Ferrocarril Belgrano Cargas que financia el Ministerio de Transporte de la Nación. Los trabajos, que realiza Trenes Argentinos, le darán una nueva dinámica al ingreso ferroviario a las terminales ACA, AGD, Cofco, LDC y Renova, y rebajará un 27 por ciento los costos logísticos.
"Este proyecto es fundamental para la productividad del ferrocarril", explicó Ezequiel Lemos, titular de Trenes Argentinos Cargas, y agregó: "Vamos a tener más puntos de descarga para exportar la producción del nordeste y el noroeste argentinos. Además, los nuevos vagones y locomotoras aumentarán su circulación y podrán transportar más".
La nueva infraestructura incluye una playa ferroviaria en Oliveros y un nuevo puente sobre el Carcarañá que estarán a cargo del Gobierno nacional, y 10 kilómetros de vías nuevas construidos por las terminales privadas. El proyecto se acompaña con la construcción de dos nuevas terminales (ACA y AGD) y la ampliación de Renova.
"Estamos ejecutando obras transformadoras en el sistema que ya están dando sus frutos porque los trenes se trasladan más rápido y de forma más eficiente", comentó el titular de Trenes Argentinos, Guillermo Fiad, y agregó: "El rol de la infraestructura es clave y los accesos a los puertos son estratégicos, porque permitirán un salto sustancial en la participación del tren en el traslado de cargas".
El proyecto
El proceso de reconversión ferroviaria comenzó a tomar forma durante 2017, cuando comenzaron a realizarse los estudios para la confección de los proyectos ejecutivos de la circunvalación férrea de la ciudad de Santa Fe y el nuevo acceso a los puertos de Timbúes. Como resultado de estos estudios se determinó la ubicación de la traza y los terrenos necesarios para poder comenzar su construcción.
Las obras se proyectaron para intervenir más de 80 kilómetros de vías, con un plazo de ejecución de 36 meses. Para la circunvalación ferroviaria de Santa Fe se prevé la construcción de 20 kilómetros de trazas nuevas, la renovación de 44 kilómetros de vías sobre trazas existentes y un nuevo puente sobre el río Salado. Las obras para el acceso a los puertos de Timbúes contemplan la construcción de 10 kilómetros de vía y un nuevo puente sobre el Carcarañá. Las nuevas vías confluirán en la futura playa ferroviaria que se construirá en Oliveros.
Los trabajos están previstos para tener un acceso ferroviario "eficiente y moderno a los puertos de Timbúes, donde hoy arriban exclusivamente por camión más de cinco millones de toneladas de granos y en los próximos años se incrementarían a 25 millones de toneladas, con la participación del ferrocarril de cargas", consignó el Ministerio de Transporte de la Nación. Asimismo, generarán "grandes beneficios como la reducción de costos logísticos, la disminución de accidentes por descarrilo en zonas pobladas, menor contaminación y la reducción de pasos a nivel mejorando la trama social y urbana". Del mismo modo, se busca generar eficiencia en el acceso a los puertos para optimizar la capacidad de carga y descarga.
Sin entrar a sectores urbanos
De esta manera, los trenes de carga evitarán el ingresar a sectores densamente urbanos del área metropolitana del Gran Santa Fe y podrán circular por el nuevo sector de vías en mejores condiciones de seguridad y velocidad. Además, podrán trasladarse en formaciones de cien vagones, lo que permitirá cuadruplicar la carga actual.
Con el objetivo de iniciar las obras de construcción, la Nación remitió oportunamente a la provincia el requerimiento formal de inicio del trámite legislativo para la declaración de interés público y ley de expropiación de los terrenos necesarios para las obras proyectadas. Tal como lo publicó LaCapital en su edición del 12 de agosto, ese proyecto fue convertido en ley por la Legislatura de la provincia. La norma establece que, si bien el trámite expropiatorio será realizado por la provincia, los gastos de las indemnizaciones serán asumidos por la Administración de Infraestructuras Ferroviarias Sociedad del Estado (Adif SE), de la órbita nacional.
Las parcelas a expropiar suman 156 hectáreas, incluidas casi 60 hectáreas en jurisdicción de la comuna de Oliveros para la construcción de una playa de maniobras, una franja de terrenos entre Laguna Paiva y Santo Tomé, y casi seis hectáreas de la comunidad mocoví Com Caia, que deberá ser indemnizada y recibirá otro terreno.
El proyecto es la concreción del acuerdo firmado en diciembre de 2013 entre Trenes Argentinos Cargas, las comunas de Oliveros y Timbúes y el consorcio de los puertos locales.
En el proceso también participaron Trenes Argentinos, el Ministerio de Infraestructura y Transporte de Santa Fe, el Ente de Coordinación Metropolitana del Gran Santa Fe y el Ministerio de Transporte de la Nación.