El merendero Ojitos Felices, ubicado en barrio La Tablita de Villa Gobernador Gálvez, asiste a unos 400 chicos y adolescentes. Además de brindarles viandas cuatros veces por semana, realizan varias campañas solidarias a lo largo del año. En esta oportunidad, ante el inminente comienzo del ciclo lectivo, están recolectando mochilas y útiles escolares para quienes más lo necesitan.
A diferencia de otras campañas, la idea es que quien quiera cooperar sepa a quién está ayudando: su nombre, su apellido y lo que necesita específicamente. "Hemos tenido muchísimos resultados organizando la campaña así. Es más difícil armar una mochila cuando la donación es general. En cambio, así se genera esa empatía que se da cuando una persona puede pensar en otra. No ve necesidades genéricas sino necesidades concretas y puntuales, y una persona del otro lado con sus expectativas e ilusiones por empezar las clases", sostiene la representante legal del merendero, María Angélica Maccagno. Además, señaló que hay chicos desde jardín hasta la facultad que necesitan los elementos para comenzar el año.
Por otro lado, serán los padres quienes les entreguen a sus hijos lo recaudado. De esta manera, se sostiene algo que resulta importante para las infancias: la presencia de los adultos en sus vidas. "La campaña tiene como eje sacarlo al chico del lugar de la vulnerabilidad, de la limosna. Intentamos que los padres sean los que reciban las mochilas y ellos puedan darle en el seno de su familia eso que no pudieron comprar", comenta Maccagno.
Quienes quieran participar de esta campaña deben anotarse de manera online en este link. Desde la asociación les enviarán los datos de un niño o niña para que puedan armarle su mochila con los elementos que necesite específicamente y será recibida el sábado 24 de febrero, entre las diez y las doce y media del mediodía, en el Mercado del Patio, frente al local gastronómico de Churrasquito.
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Bajo el lema "Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo", el merendero Ojitos Felices respalda a cientos de chicos que vive en una zona muy precaria de la localidad vecina. "Esta es la colecta más fuerte, la que le damos mayor importancia porque es la columna vertebral del proyecto. Pensamos que los chicos pertenecen a las aulas y que la mejor forma de forjar un futuro es que ellos pasen ahí adentro la mayor parte del tiempo posible. Nuestro objetivo principal es ayudarlos a que eso ocurra. Ayudarlos a conseguri todo lo que necesitan para la escuela es una prioridad", afirma Maccagno.
Además de la campaña que están realizando ahora, llevan adelante cuatro más a lo largo el año. Una en invierno para juntar ropa de abrigo y zapatillas, otra para el Día del Niño, una colecta en Navidad y, finalmente, una en Año Nuevo. "Si podemos metemos una en pascuas pero este año es difícil. Generalmente, tenemos cien anotados el primer día de abrir la campaña y esta vez solo tuvimos seis. Nos asustó mucho, pero a medida que empujamos la campaña se va moviendo. Sabemos que no se puede ayudar a todo el mundo pero les proponemos que cuando puedan y quieran ayudar piensen en nosotros", concluyó Maccagno.